Mexicali BC 15 de septiembre de 2014 (AFN).- De acuerdo a datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la diabetes es la enfermedad con mayor prevalencia en la frontera norte de México, encontrándose entre las principales causas de muerte e invalidez, como resultado del estilo de vida de la población, relacionado con malos hábitos alimenticios y sedentarismo.

 

  El doctor Arturo Rentería Lara, coordinador de Atención Médica del IMSS en la Delegación Baja California, subrayó que la diabetes se ubica como un problema de salud pública que afecta a millones de mexicanos. Este padecimiento se considera  una de las primeras causas de muerte en mujeres y la segunda en hombres, “pero además es el primer motivo de invalidez por daños renales, ceguera y amputaciones” afirmó.

 

  El especialista en Medicina Interna estimó que la población adscrita a Medicina Familiar del IMSS supera 1 millón 600 mil derechohabientes, de ellos más del 50 por ciento son mayores a 20 años y de éstos, más de 30 por ciento presentan la enfermedad.

 

  Advirtió que la prevalencia de diabetes en la región no sólo ocurre en adultos mayores sino que se ha detectado en personas con edades entre 25 y 44 años, seguidos de pacientes con edades superiores a los 50 años.

 

  Rentería Lara explicó que este padecimiento, además de estar relacionado con la herencia, tiene que ver de manera directa con estilos de vida, por lo que se estima que en esta zona del país se privilegian hábitos alimenticios de alto contenido calórico, poca fibra vegetal, con carbohidratos que elevan fácilmente la glucosa de la sangre, grasas saturadas (de origen animal), además del tabaquismo y sedentarismo, lo que da por resultado un alto porcentaje de la población con sobrepeso. 

 

 El especialista  subrayó que el Seguro Social lleva a cabo una campaña para promover estilos de vida saludables entre la población además de insistir en  la necesidad de que las personas con sobrepeso u obesidad, que además tengan antecedentes de un familiar con diabetes, acudan  a los consultorios PrevenIMSS ubicados en todas las unidades de medicina familiar a fin de realizarse la prueba de detección de diabetes. 

 

  Las personas mayores de 45 años aún sin factores de riesgo, deben asistir a consulta cuando menos una vez al año a realizarse la revisión, indicó el médico del IMSS.

 

  Para el diabético no hay alimentos prohibidos –dijo-  ya que pueden comer lo que quieran pero en cantidades moderadas, aunque es conveniente que consuman más  fibra vegetal, semillas, frutas y verduras; reducir las grasas de origen animal y azúcares simples.

 

  A fin de evitar evitar o retrasar las complicaciones de la diabetes –puntualizó- es importante tener un estricto control del azúcar, presión arterial; colesterol y triglicéridos  y en algunos casos, recurrir a tratamientos a base de dieta específica; ejercicio físico y algunos medicamentos sólo en caso de ser prescritos por el especialista.