TIJUANA BC 29 de marzo de 2012 (AFN).- Los cuatro hombres que acusaron en días recientes al Ejército Mexicano ante el Comité contra la Tortura de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), son según los datos que fueron proporcionados en junio de 2009, individuos que formaban una banda de secuestradores que además eran responsables de numerosos crímenes. Formaban parte, según se dijo en aquel entonces, del grupo criminal que encabezaba Ángel Jácome Gamboa, alias “El Kaibil”, ligado con Eduardo Teodoro García Simental, alias “El Teo”.

Estos hombres lograron llegar ante esa instancia internacional a través de tres organizaciones no gubernamentales del país, que informaron en conferencia de prensa el pasado 28 de este mes, que el Comité de la ONU revisaría la queja presentada y que de encontrarla con bases, notificaría al Estado Mexicano.

Según esas organizaciones, los hermanos Ramiro y Rodrigo Ramírez Martínez así como Orlando Santaolaya y Ramiro López Vázquez, se quejaron de haber sido detenidos por elementos militares encapuchados, sin orden judicial de por medio y luego torturados y mantenidos aislados en viviendas particulares.

Sin embargo esto fue negado por las autoridades militares de Baja California, que dijeron que ya demostraron ante los grupos de derechos humanos en el país, que han estado actuando dentro de los lineamientos que en ese sentido les han marcado.

El General de División Alfonso Duarte Mújica al ser entrevistado al respecto comentó con Agencia Fronteriza de Noticias que Baja California prácticamente no tiene recomendaciones por violaciones a los derechos humanos, ya que en los casos en los que se han señalado presumibles irregularidades, se ha actuado de inmediato estableciendo correctivos.

En días pasados, Andrea Meraz, dirigente de una de esas organizaciones no gubernamentales informó que la denuncia se presentó en Ginebra Suiza y reiteró que si se determina que se violaron los derechos humanos de los cuatro involucrados, entonces se le dará entrada a su caso y se pedirá oficialmente al gobierno mexicano que dé respuesta a los alegatos.

Largo “corrido”

El 16 de junio de 2009, Agencia Fronteriza de Noticias informó que Ramiro Ramírez Martínez, uno de los que ahora acusa al Ejército y que fue identificado como “El Rambo” estaba considerado como uno de los despiadados secuestradores que sembró terror y muerte en Tijuana durante esos años.

Detenido por el Ejército Mexicano, al Rambo se le ligaba en una averiguación previa junto con el policía Christian Castro alias “El Peinado” y otros más, con varios casos de plagios y asesinatos.

Del Rambo, establecían informes oficiales que era quien giraba instrucciones a los uniformados sobre las personas que tendrían que ser “levantadas” y luego ordenaba sus ejecuciones. Se le relacionó con el “levantón” y muerte de Evaristo Partida (a) “El Chilerito”, quien fue sacado con lujo de violencia de su local en la Central de Abastos.

De igual forma se dijo que fue responsable de la desaparición y posterior crimen de Isidro Jaramillo, propietario de fraccionamientos considerados irregulares.

Al Rambo lo detuvieron junto con:Orlando Olaya Villareal “El Chuletas”; Rodrigo Ramírez Martínez, alias El Gordo” y Ramiro López Vázquez, que son precisamente los otros tres individuos que ahora acusan a los militares.

A éstos, se les decomisaron 17 armas largas y cuatro cortas; 278 cargadores; 14 mil 642 cartuchos útiles, 3 vehículos, 27 chalecos antibalas y demás equipo táctico.
Se les encontró al momento de su detención, dijo el Ejército, junto con una persona secuestrada desde el 24 de mayo del mismo año.

A “El Kaibil” lo detuvieron en el mes de marzo previo, cuando participaba de una fiesta familiar de 15 años.