MEXICALI BC 19 DE OCTUBRE DE 2015 (AFN).- Siempre ha existido la idea de que una mujer embarazada debe comer más de lo habitual, pero en cambio debe prestar atención a la cantidad y calidad de su alimentación y vigilar sea la adecuada con nutrientes básicos vitales para el buen desarrollo del bebé.
En el marco del Día Mundial de la Alimentación que se llevó a cabo el viernes 16 de octubre, la Secretaría de Salud invita a las mujeres en edad reproductiva a llevar una alimentación balanceada y adecuada que brinde ventajas a madre e hijo, señaló José Rojas Serrato, Director del Hospital Materno Infantil.
El especialista refirió que las mujeres necesitan comer bien a lo largo de su vida, pero sobre todo cuando están en edad en la que puedan planean tener un hijo, están embarazadas o en período de lactancia; ya que si se alimentan de forma saludable tienen mayores posibilidades de mantenerse vigorosas y activas, tener hijos sanos y una lactancia satisfactoria.
El Hospital Materno Infantil destina un presupuesto anual superior a los 4 millones de pesos para alimentación de las pacientes, quienes durante su hospitalización reciben una dieta acorde a sus necesidades, diseñada por el equipo de médicos y nutriólogos. Se trata de 140 mil raciones anuales, saludablemente equilibradas, que incluyen desayunos, comidas, cenas, dietas líquidas y colaciones, declaró el funcionario estatal.
Las recomendaciones para las mujeres en gestación son las siguientes: Seguir una dieta balanceada que contenga bastantes alimentos ricos en hierro; Beber abundante agua u otros líquidos saludables, limpios y seguros; utilizar sal yodada al cocinar los alimentos, ya que las mujeres con un déficit de yodo cuando quedan embarazadas, corren el riesgo de tener un hijo con daño mental y físico.
Si la mujer registra bajo peso al inicio del embarazo o se desnutre durante el mismo, es más probable que su hijo tenga un bajo peso al nacer. Los niños y niñas que nacen con bajo peso, tienen un mayor riesgo de: Crecer y desarrollarse con retraso, Contraer infecciones y morir; mientras menor sea el peso al nacer, mayor es el riesgo de morir. Tener bajas reservas de micro nutrientes, lo que puede provocar enfermedades como la anemia; Desarrollar enfermedades del corazón, hipertensión, obesidad y diabetes en la edad adulta.
Rojas Serrato, precisó que las mujeres que inician su embarazo con un peso normal deben aumentar alrededor de un kilo de peso mensual en el segundo y tercer trimestre del embarazo, durante el segundo trimestre, hacerlo gradualmente cuidando su alimentación.
Puntualizó que durante la lactancia, las mujeres necesitan un poco más de calorías extras que en el embarazo y más proteínas, calcio, zinc, vitamina A, vitamina C y ácido fólico; esto le permitirá producir suficiente leche para amamantar al niño y que éste crezca sano, por ello debe aumentar las cantidades de alimentos especialmente la leche o queso, carne o huevo, vegetales verdes, amarillos y frutas.
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