ENSENADA BC 25 DE AGOSTO DE 2015 (AFN).- Médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advierten que agitar bruscamente a un niño le puede causar graves lesiones en el cerebro, por lo que exhortan a padres y personas que tienen bajo su cuidado a un bebé a no emplear esta agresiva técnica para hacer que un infante cese su llanto.
El doctor Juan Manuel Álvarez Marín, pediatra del Instituto Mexicano del Seguro Social No 8 (IMSS) Ensenada, indicó que sujetar a un niño de las costillas o los hombros y sacudirlo hacia adelante y hacia atrás, es la opción menos indicada para hacer que deje de llorar
Explicó que la frágil condición del bebé podría acarrear afecciones en la corteza cerebral o los huesos de la espalda y brazos.
Este cuadro clínico es común en menores de 1 año de vida, aunque los bebés de dos a cuatro meses son los más expuestos debido a que son más frágiles. Las consecuencias más frecuentes del sacudimiento son: parálisis, ceguera, lesión cerebral, dificultades de aprendizaje, de comportamiento y lo más grave, la muerte.
Los principales síntomas son: irritabilidad, rigidez, letargo, disminución de apetito, pupilas dilatadas, problemas de alimentación, dificultad para respirar, vómito, puntos de sangre en los ojos y baja tonalidad en los músculos.
Cuando el bebé rompa en llanto, dijo el especialista, hay que verificar si no tiene hambre, calor o frío; cambiarle el pañal y revisar que no tenga fiebre; si aun así el menor continúa llorando habrá que acurrucarlo en brazos, tratar de distraerlo y ofrecerle alimento; hacerlo eructar con frecuencia, ponerle música suave; sacarlo a pasear es una buena opción para relajarlo.
Álvarez Marín subrayó que si nada funciona, hay que acudir al médico, tomando en cuenta que no todas las enfermedades presentan síntomas visibles o de fácil detección para los padres.
Recomendó para prevenir lesiones: nunca sacudir a un niño, sostenerle la cabeza y el cuello firmemente; jugar siempre de manera suave y saber qué hacer cuando llora.
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