TIJUANA BC 17 DE AGOSTO DE 2015 (AFN).- Psiconutrición,  “Un camino hacia el equilibrio” fue el tema abordado por el Psicólogo del Grupo Evemeria, Christopher Casas Cisneros, egresado de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), durante una plática esta mañana ante el personal de Agencia Fronteriza de Noticias (AFN).

El especialista explicó la importancia de cómo diferenciar el “hambre física de la emocional, ya que la primera, dijo, permite que la persona se alimente adecuadamente y sentirse satisfecha con lo que consume, a diferencia del “hambre emocional” que enmascara diversos problemas que se presentan -muchos de ellos desde la niñez- y los cuales se sustituyen con alimentos que no nutren correctamente y que en cambio aportan “grasas malas” al organismo.

La charla forma parte de las jornadas de salud, que el Grupo “Evimeria” que encabeza la doctora María de los Ángeles Salazar Méndez, está ofreciendo a integrantes de esta agencia, para mejorar su calidad de vida, basado en la buena salud.

El hambre emocional, añadió Casas, genera sobrepeso y obesidad, detonando un cuadro de salud, que lleva a las personas -a causa del estilo de vida, entorno familiar y laboral, así como el estrés del diario acontecer- a ingerir “comidas rápidas” “snaks” y  “comida chatarra” para suplir esta necesidad de “sentirse bien”, cayendo en un círculo vicioso, que no encuentra cómo romper.

Esto, señaló Casas Cisneros, ni siquiera se hace en “forma consciente”, sino que son patrones de conducta aprendidos, que se dan por “asociación” y así se observa, por citar un ejemplo, a una persona  que experimenta algo de ansiedad y sin saber por qué, “surge la necesidad de comer un helado”; esto pudiera ser porque en su niñez, al “sentirse mal” mamá lo calmaba con un helado”, dijo.

También señaló que en la mayoría de las ocasiones, las personas consumen alimentos por saciar una necesidad del momento, pero el ingerir determinados alimentos ante una “urgente necesidad” puede estar encubriendo un problema de fondo, asociado con un evento pasado, o bien con esto se busca la manera de evitar enfrentarse a responsabilidades o tareas que no son de su agrado.  

El psicólogo señaló que es importante ante esta problemática dar soluciones en conjunto en partes iguales, porque un programa integral de salud, permitirá al individuo identificar dónde se encuentra el problema y trabajar en él, de manera  individual y sostenida.

Para concluir, recomendó estar atentos a  patrones de conducta,  e informarse sobre cuál es la mejor manera de alimentarse, acorde al estilo de vida, e incluir una rutina de ejercicios -también de manera gradual y sostenida- a través de un programa integral mediante el que se trabajen “cuerpo, mente y espíritu”.