Tijuana BC 3 de febrero de 2015 (AFN).- Durante la temporada en la que la temperatura baja, se deben extremar las medidas preventivas más allá de las enfermedades comunes de la época, mencionó la doctora Maribel Inostroz Méndez, directora de la Unidad de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tijuana.
La especialista refirió que si bien las precauciones se centran en las vías respiratorias, es importante cuidar otros órganos de nuestro cuerpo como lo es la piel, que al estar expuesta a las bajas temperaturas puede padecer xerosis o sequedad extrema, lo que predispone a otros problemas cutáneos.
Advirtió que en las personas que padecen problemas circulatorios, suelen agravarse cuando el termómetro desciende, ya que con el frío la piel sufre de deshidratación al disminuir la humedad relativa del aire, lo que seca considerablemente la epidermis.
Referente a la frecuencia de los trastornos en la piel, señaló que las mujeres son más vulnerables que los hombres. La tez blanca –dijo-es más sensible que la morena y las personas mayores acuden a consulta con mayor frecuencia debido a que la comezón se acentúa en casi todo su cuerpo.
Por tanto, - advirtió- , el frío también puede provocar la aparición de sabañones (lesiones enrojecidas en las manos), urticaria al frío, livedo reticularis (especie de coloración azul en las extremidades), acrocianosis (manos y pies morados) y el fenómeno de Raynaud que es el enrojecimiento de la piel también en extremidades.
Explicó que si bien, en esta región del país estamos acostumbrados a lidiar con las bajas temperaturas, es importante tomar en cuenta algunos puntos preventivos para no tener problemas cutáneos como hidratar adecuadamente todo el cuerpo, pero especialmente la cara y las manos, ya que son las partes más expuestas y tener cuidado con los labios, ya que resultan muy dañados por el frío.
La especialista del IMSS, recomendó usar ungüentos labiales con protección solar y sobre todo, evitar humedecer los labios con saliva, pues cuando estén secos - aunque en un primer momento aporta una sensación de alivio-, después produce irritación y sequedad aún mayor.
También recomendó no abusar de los baños con agua caliente, ya que perjudican la epidermis y son malos para la circulación; además –puntualizó- tras la ducha es importante terminar siempre con un chorro de agua fría, sobre todo en las piernas. Para concluir, invitó a la población acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) cuando se presente cualquier síntoma para ser atendido por su doctor y, de ser necesario, canalizarlo a un especialista.
