El “Fuhrer” de la UABC.
Por: Gilberto LAVENANT
El nombre de Hitler, aún para aquellos no afectos a la historia, trae referencias horrendas del comportamiento de un hombre desquiciado, que cometió los crímenes más horribles y condenables, el prototipo de un dictador.
Conocido como “El Fuhrer”, dominó la Alemania nazi, de 1934 a 1945. Se ha dicho mucho sobre este individuo. En los últimos años se han hecho películas sobre algunos pasajes de la vida de éste maníaco.
De una de esas películas, al parecer la de “El Fuhrer”, presuntamente estudiantes de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Baja California, supuestamente de Mexicali, tomaron de base algunas escenas para hacer una parodia respecto del comportamiento del director del plantel.
Lo denominan : Un día en la FCPyS, UABC.
Ayer miércoles, por la tarde, el columnista autor de Palco de Prensa, vía correo electrónico, recibió el breve video de esta parodia hitleriana que seguramente ya está circulando en todo el ámbito universitario.
Como en las películas extranjeras, con subtítulos en español, se desarrollan las escenas, en las que se observa a Hitler rodeado de algunos de sus más cercanos colabradores, reclamándoles por no haber podido controlar a los estudiantes que en un plan estratégico, por diversos frentes, logran copar la Facultad.
Obviamente el personaje central, en este caso Hitler, es presuntamente el Director de la Facultad universitaria. Además de reclamar airadamente a sus colaboradores, en especial a su subdirector, el no haber podido controlar a “los morros”, hace una grosera presunción de su poder, del dominio que ejerce, gracias a su relación con el Rector y la Junta de Gobierno.
Las parodias, como en este caso, apoyándose en escenas de una película relativa a la conducta de un individuo detestable, permiten representar o reflejar la conducta de personajes de la política, o de cualquier actividad social, como lo es la educación universitaria, de una manera quizás exagerada, ridiculizando un tanto el comportamieno del personaje, pero que a la vez permite tener una idea bastante clara sobre su conducta indebida.
Observando las escenas, aunado a los textos de los diálogos, aunque con cierta dificultad, pues no se puede separar la idea de lo que representó Hitler, permite imaginar la conducta de quien se pretende representar y pone de manifiesto que las cosas no andan muy bien en la Máxima Casa de Estudios. Al menos en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales.
Quienes conocen al presunto Director y su conducta, seguramente están en condiciones de determinar si la parodia se acerca a la realidad. O, a la mejor, se quedó corta.
De cualquier forma, resulta evidente el ingenio universitario, al mezclar una supuesta realidad, con un personaje tan controvertido como “El Fuhrer”, y elaborar un trabajo que podría ser considerado como una denuncia de conductas indebidas, de un tipo que gobierna de manera arbitraria, sabiéndose protegido por las autoridades universitarias. Veamos algunos de los textos de la parodia en mención.
El Furher estalla y a gritos les dice a sus cercanos colaboradores -Les dije que pusieran en paz a esos morros, les dije que iban a perder el órden. Pero que les quede claro que yo soy intocable.
-Yo soy amigo del Rector y de la Junta de Gobierno. Por eso meto a trabajar aquí a sus familiares. (hasta afuera de la oficina, se escuchan sus gritos y secretarias y demás personal, asustados, siguen el desarrollo del evento).
-Por eso –agrega- aunque las secretarias se quejen en recursos humanos, a mí no me hacen nada. Hasta los maestros que fueron con el sindicato, no me pudieron hacer nada, el sindicato son unos pelagatos.
Unos de los presentes reclama ; -Yo soy el representante sindical. El Fuhrer airado lo silencia : -¡ Usted cállese, a mi me la pela! -Le repito que soy el representante sindical, insiste… -¿Y qué carajos piensa hacer ?
-Si no me creen, hablen con los medios de comunicación, hablen con las autoridades, hablen con quien quieran. Mi esposa está trabajando aquí y gana lo que yo quiero.
En otra parte, advierte : -A mí me gusta hacer lo que se me da la gana.
Afuera, mientras una secretaria solloza, otra le consuela : -Tranquila Claudia, ya pedimos nuestro cambio.
Nostálgico, pausado, el Fuhrer dice : -He viajado por el mundo, con recursos de la facultad En los mejores hoteles y bebiendo champaña. Y los maestros, los que he metido, son los más inútiles y poco capaces que he conocido. Hasta venden a los alumnos libros del DAX.
-Siempre he sido un inútil, concluye.
El fin ¿del Director ? no creo, está bien apoyado, cierra el video.
Si la parodia pretende reflejar la realidad de lo que se vive en dicha Facultad universitaria, es algo sumamente grave. Sobre todo si el personaje central, el Director, actúa como el Fuhrer, sabiéndose respaldado por el Rector y la Junta de Gobierno.
