Mexico, DF 17 de julio de 2014 (kaleydoscopio.mx).- Las estadísticas no dejan lugar a dudas, las estaciones de gasolina son campo de acción de la delincuencia sin que las autoridades tomen medidas para acabar con los ladrones de la bomba en mano. La situación es grave y el diputado Omar Antonio Borboa Becerra alerta sobre los latrocinios, en México: cuatro de cada 10 gasolineras venden litros de combustible incompletos.
Las denuncias se suceden desde hace tiempo, pero nadie pone freno a los delincuentes, sin importar que las gasolineras sean una concesión y el gobierno podría retirarlas a quienes roban impunemente. El legislador dice que 36% de los 2,359 establecimientos que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) verificó en 2013 defraudan.
Integrante de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción señala que el delito más recurrente en 849 gasolineras es la alteración en las bombas.
Esta problemática se ve agravada por la presunta complicidad entre autoridades y encargados de las gasolineras, empresarios, gerentes y administradores, quienes “están enterados anticipadamente sobre los operativos que la Profeco realiza en estos establecimientos”.
El legislador afirma que testimonios de los trabajadores de las gasolineras evidencian que antes de que llegue una visita de verificación, los encargados ajustan las máquinas para evitar que la irregularidad sea detectada. Mediante computadora, teléfonos móviles o radios de intercomunicación avisan a los administradores de otras estaciones de servicio.
Por ello, planteó exhortar a la Profeco para que promueva y apoye la constitución de un comité ciudadano externo que de seguimiento a las verificaciones de las gasolineras a nivel nacional; que las visitas sean permanentes, y que se haga público y actualice el registro de la cantidad alterada y la ubicación de las estaciones que son clausuradas, así como las sanciones impuestas.
Borboa Becerra pone el acento en varios puntos negros:
Un informe de la Profeco, vía solicitud de acceso a la información pública, halló que en la Ciudad de México se descubrieron anomalías en 128 de las 429 gasolineras inspeccionadas.
Coahuila es la entidad que registra, porcentualmente, uno de los mayores índices a nivel nacional de gasolineras que sirven menos litros de los que venden, pues de los 89 establecimientos revisados el año pasado, se detectaron fallas en un total de 52, más de la mitad.
En Nuevo León, se encontraron anomalías en 68 de las 176 estaciones de servicio de combustible verificadas el año pasado, es decir, 39%.
Una gasolinera de cada tres revisadas por la Profeco en Monterrey registró abusos; en el municipio de San Pedro, el porcentaje de gasolineras con irregularidades sube hasta más de la mitad.
En Jalisco se encontraron presuntas faltas en 92 de los 189 establecimientos inspeccionados por la dependencia federal. Guadalajara es el municipio de ese estado con el mayor porcentaje de estaciones que venden menos litros a los automovilistas, precisó.
La verificación de gasolineras ubicadas en el Estado de México arrojó que 34% presentó anomalías, y en Veracruz, 58 de 119 observaron inconsistencias en la venta de este combustible al menudeo.
