*.- Sin embargo seguirá el proceso en libertad

*.- La Iglesia espera que se atienda el tema con seriedad

 

El auto de formal prisión por los delitos de despojo y otros de los que fue acusado, se dictó al padre Raymundo Figueroa Pérez, quien de esta forma se convierte en indiciado y no podrá abandonar la ciudad. 

 

Esto fue confirmado por el Arzobispo de la Arquidiócesis local, Rafael Romo Muñoz, al ser interrogado por Agencia Fronteriza de Noticias sobre la supuesta decisión del Juez de lo Penal Ramón Ruiz González, al cumplirse este día el término con el que contaba para determinar la situación legal del mencionado.

 

El Arzobispo aclaró que no obstante eso, el ex Párroco del Templo del Santísimo Sacramento “seguirá el proceso en libertad, por contar con el beneficio de una fianza, según se les indicó a través de su representante legal. 

 

De igual forma, el juzgador declaró a AFN que decretó el Auto de Formal prisión en contra del religioso, porque lo encontró responsable de los delitos de los que fue acusado. 

 

Dijo que no puede precisar el tiempo en que podrá dictar sentencia en este caso, porque se tienen que desahogar varias pruebas que serán presentadas por ambas partes. 

 

El Arzobispo agregó que aunque esto es una decisión del juzgador, esperan que el caso se siga con seriedad, debido a que los delitos de los que se le acusa a Figueroa Pérez, son graves, como el hecho de haberse apropiado del Templo del que fue removido, no obstante que está asignado a la asociación religiosa que es la Iglesia Católica local. 

 

Por otra parte, el Arzobispo indicó que al margen de lo que las autoridades “civiles” hagan en este asunto que ha lastimado a la Iglesia, la autoridad eclesiástica continúa con el proceso que también ha abierto en torno a este hombre, al que las autoridades federales ya le retiraron el reconocimiento que le permite ejercer. 

 

Señaló que el caso de quien ahora llaman “El señor Figueroa”, se encuentra también en manos del Vaticano, que está por emitir su sentencia final que sería el devolverlo a su calidad de civil. 

 

El arzobispo añadió a la Agencia que han seguido todas las instrucciones de Roma y sus indicaciones en este caso, otorgando todas las oportunidades al padre “Ray” para su arrepentimiento, sin embargo esto no ocurrió. 

 

Con el auto de formal prisión decretado por el Juez Ruiz González, el padre Figueroa se convierte en el primer sacerdote católico que enfrenta un proceso penal que lo obliga a firmar cada semana y a no ausentarse de la ciudad sin permiso expreso, porque de lo contrario se convertiría en prófugo de la justicia. 

 

El pasado sábado, de manera sorpresiva el padre Figueroa se presentó al juzgado a declarar “de manera voluntaria”, no obstante que no se informó públicamente de la existencia de una orden de aprehensión en su contra, lo que según se dijo a AFN, provocó una inconformidad de la representación legal de la Iglesia, ya que se observó una actitud de favoritismo hacia el acusado. 

 

Confirma juez auto de formal prisión a “Ray” 

 

El Juez de Primera Instancia Penal de Playas de Rosarito, Ramón Ruiz González, encontró culpable a Raymundo Figueroa y le dictó auto de formal prisión como probable responsable del delito de despojo. 

 

Sin embargo, el padre “Ray” depositó una fianza de cinco mil pesos para gozar de su libertad en lo que termina el proceso. 

 

Como parte de las condiciones puestas por las autoridades mientras finaliza el juicio, Figueroa se vio comprometido a asistir a los juzgados de Rosarito a firmar todos los días viernes de cada semana, no podrá salir de la ciudad sin razón justificada y deberá obedecer lo que dictamine el propio juez, informó Ruiz González. 

 

También dijo que de acuerdo al artículo 226 fracción primera del Código Penal en vigor, se abrió un periodo de seis meses para que las partes afectadas aporten las pruebas que consideren convenientes para defender su postura, y si no están de acuerdo con la decisión, podrán apelar al Tribunal Superior de Justicia.