La Unidad de Control Canino, perteneciente a la Dirección de Servicios Médicos Municipales, negó de manera categórica los comentarios que aseguran una supuesta ejecución de 50 canes a través de métodos de descargas eléctricas o electroshock. Ángel Martín Guerra, Médico Veterinario y responsable de dicha unidad, externo su preocupación por el trasfondo que pudiera tener esa versión, la cual calificó como “descabellada y carente de fundamento o veracidad, ya que dijo, afecta la imagen de la dependencia entre la ciudad. “Nada más alejado de la realidad, de entrada ese método de matanza fue desechado desde hace varios años no sólo de nuestra ciudad, sino de casi todo el estado; por otra parte eso sería imposible pues en la perrera ni siquiera contamos con el servicio de energía eléctrica”, dijo. El funcionario agregó que en coordinación con los médicos veterinarios de la ciudad, así como con fundaciones altruistas como el Santuario de Animales y Give Some Life, entre otras instituciones, se trabaja de forma coordinada para brindar un trato digno y humanitario a las mascotas. Apuntó que las mascotas son retiradas de las calles cuando son cruelmente abandonadas por sus dueños, y son sacrificadas mediante la inyección letal.