CIUDAD DE MÉXICO 23 DE JUNIO DE 2016 (SDPNoticias).- Neal Gray, el abuelo materno de la niña, advirtió claramente a la jueza que Ben Butler tenía un comportamiento violento. La pequeña Ellie, de apenas seis años, murió a manos de su padre cuando este la golpeó brutalmente en la cabeza. 

Su muerte pudo haberse evitado de una y mil maneras, sobre todo cuando la propia niña pidió en repetidas ocasiones que no la forzaran a vivir con él. Ben Butler había perdido la custodia de su hija cuando a los 18 meses de nacida la agredió físicamente y Ellie quedó a cargo de sus abuelos.

Sin embargo, luego de escuchar al menos a 20 médicos y diferentes forenses, la jueza local determinó que los padres debían recuperar la custodia, pese a que la niña no estaba de acuerdo.

Neal Gray, el abuelo materno de la niña, advirtió claramente a la jueza que Ben Butler tenía un comportamiento violento y que los tribunales podrían "acabar con sangre en sus manos".

De acuerdo con la sentencia, "Ellie murió como resultado bien de que su padre la golpeó en la parte posterior de la cabeza con la pata de una mesa o bien la golpeó con tanta fuerza que la pata se rompió cuando la cabeza de la menor se dio contra la mesa, lo que explica la fractura de cráneo que generó su muerte".

Tras reconocer el crimen, la madre fue condenada a 42 meses de prisión por delito de obstrucción y el hombre a un mínimo de 23 años de cárcel por asesinato.