Por: Alejandro Zepeda

ENSENADA BC 4 DE DICIEMBRE DE 2025 (AFN).- Hay cosas que uno teme cuando va al baño en un estadio, ¡que no haya papel!, ¡y que no haya agua!

En el Deportivo Antonio Palacios ocurre la dupla completa, como si fuera parte del espectáculo deportivo.

Ahí, donde los aficionados entran con nostalgia y salen con resignación, reina una escena digna de estudio sociológico, baños sin agua y aficionados con botecitos, formando pequeñas procesiones para hacerle honor al drenaje.

¡Pero no! ¡no se confunda! la falta de agua no es por “conciencia ecológica” ni por el espectacular de la entrada que invita a “Conocer a los defensores del agua”.

¡Ojalá!

La realidad es menos poética y más vergonzosa, a la Liga Municipal de Béisbol de Ensenada le cortaron el agua por una deuda de 879 mil 200 pesos.

La cuenta 038729924 no ve cariño desde 2018, cuando empezaron a acumular deuda como si fuera una colección privada.

La última vez que CESPE recibió una limosna deportiva fue en septiembre de 2018, cuando se dignaron a llevar 4 mil pesotes. Antes de eso, en 2017, 3 mil 071. Pero en 2016 la Liga Municipal dio una cantidad muy seria cuando “soltaron” la módica suma de tres millones de pesos, obvio con ayuda del Gobierno del Estado.

Luego nada.
Silencio administrativo.
Abstinencia financiera.

Mientras tanto, los baños del Antonio Palacios se han convertido en un ritual prehispánico, agarras el botecito, lo llenas del bote gigante, haces lo que tienes que hacer, y rezas.

Eso sí, para papel hay un rollito en la tiendita. Esa es la aportación humanitaria del inmueble.

Lo más triste es que cada semana se juega béisbol ahí. Cada semana llegan familias, mujeres, niñas, deportistas, turistas, árbitros, peloteros… todos enfrentando la misma ruleta rusa sanitaria.
Y la deuda, como si nada.

Pero aquí no acaba la tragicomedia.

Resulta que nosotros les conseguimos un convenio, porque si algo sobra aquí es voluntad de ayudar y CESPE está dispuesta a condonar 445 mil 822 pesos si pagan este mes. Así es, solo tendrían que liquidar 438 mil 822 pesos. Fácil, ¿no?

Y si aún así “se les complica tantito”, pueden dar un anticipo de 165 mil 064 pesos y el resto se va a seis mensualidades de 64 mil 186 pesos.

Más fácil que un toque de sacrificio.

En resumen, el Antonio Palacios no tiene agua, pero sí tiene historia; no tiene saneamiento, pero sí afición; no tiene voluntad de pago, pero sí deuda.

Y sigue siendo la “catedral del béisbol”.

Solo que hoy… hay que ir confesado. Y con papel.

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