Mexico DF 28 de julio de 2014 (kaleydoscopio.mx).- El empleo infantil suele ir de la mano con la explotación y las carencias económicas familiares, tanto que prácticamente 8 de cada diez mexicanos (77.9%) tienen la impresión de que los niños trabajadores son explotados o mal pagados, descubrió una encuesta de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE).

 

Directos, los entrevistadores indagaron ¿usted cómo cree que estén los niños que trabajan en México?, y las respuestas dejan ver un panorama desolador, pues 80 de cada cien ciudadanos señalan que a los menores se les paga mal y 15 más afirman que no reciben pago alguno. Sólo 2.6% piensa que sus sueldos son buenos.

 

En esta misma línea de investigación, los encuestadores preguntaron ¿usted cuánto cree que se combate en México la explotación laboral infantil? Más de la mitad piensa que es deficiente, 28 de cada cien personas mencionaron que se combate poco y otras tantas creen que no se hace nada para evitar el problema social.

 

3 de cada diez tienen idea de que se hace mucho por impedir que los menores sean explotados laboralmente y 11 sienten que algo se hace. 

 

De una y otra forma el empleo de niños, niñas y adolescentes por un salario es una deuda social, campo en el que 66% de los mexicanos ve que los pequeños trabajan en las inseguras calles, 17 los observa en supermercados, 7 en pequeños comercios, 3 en fábricas. Los encuestados también mencionaron “otros” sitios, campo y mercados.

 

Al cuestionar ¿cuál es el trabajo en el que se emplea a más niños?, GCE (www.gabinete.mx) halló concordancia con dónde están los menores que laboran.

 

30.2% de los entrevistados (telefónicamente por todo México) mencionó que donde más se emplea a niños y niñas es en los supermercados como cerillos o empacadores, 28.7% respondió que se dedican más a vender dulces en las calles, 22.2% trabajan como limpiaparabrisas. 

 

Lejos, 3.7% señala que son boleros, 3.4% obreros, 3.2% dependientes de pequeños comercios, 2% empleados domésticos, 1.3% mensajeros; 5.3% no respondió o lo hizo con un evasivo “no sé”.

 

En la mayoría de las sociedades avanzadas el trabajo infantil es una asignatura pendiente, lo cual parece acorde con el pensamiento de los mexicanos. Las respuestas que obtuvo GCE entre 800 personas de todas las condiciones sociales y económicas sobre a qué edad debe comenzar a trabajar una persona: 

 

3 de cada cinco piensan que lo ideal es de las 15 a 19 años, 24 de cada cien señalan que el empleo debe comenzar de los 20 a los 24 y para 5 el trabajo no debe iniciar antes de los 24. Apenas 5% de los consultados dijo que se puede dar empleo a personas de 10 a los 14 años y 5.3% no respondió o mencionó que no tiene idea.