TIJUANA BC 22 de julio de 2011 (AFN).- Ante la inquietud que ha causado entre integrantes del mundo cultural y de la comunidad italiana radicada en Tijuana, el Centro Cultural (CECUT) reveló que el conjunto escultórico denominado “Encuentro de Dos Mundos”, no fue removido sin motivo del sitio donde se encontraba, sino que se retiró para ser restaurado.

  Se trata de una escultura con peso superior a las 16.4 toneladas que se apreciaba en el exterior del Centro Cultural y que por sus dimensiones estaba causando un grave deterioro estructural en la explanada del CECUT.

  Por lo tanto, se tomó la decisión de reubicarlo temporalmente dentro del mismo predio, en tanto se le restaura y como “paso previo a su nuevo emplazamiento”, informó la dirección.

  El retiro de ese monumento, de la autoría de Guillermo Castaño, provocó inquietud primero y luego malestar entre quienes consideraron que se trataba de una agresión de parte de la dirección del CECUT, a un acto de buena voluntad de la comunidad italiana que lo regaló a Tijuana en 1992, dentro del marco de los festejos del medio siglo del llamado “Descubrimiento de América”

 Tras su entrega, fue ubicado en el costado sur del Domo IMAX, como parte de las celebraciones por ese quinto centenario del “Encuentro de dos mundos”.
  La dirección del CECUT hizo saber que el peso de la escultura y su base, obsequiada por el Círculo Italiano de las Californias así como el desgaste de los materiales y el grave deterioro sufrido, volvieron urgente su reubicación, según se estableció en dictámenes técnicos en poder del CECUT.

  Además de su gran peso, el monumento tiene 7.40 metros de altura por 6 metros de ancho y 3 metros de espesor; cuenta con una estructura de acero, recubierta de latón y metalath, con emplaste de cemento y arena. La figura por sí misma, tiene un peso de 10 toneladas, pero, adicionalmente, la base sobre la que se asienta, pesa otros 6 mil 480 kilogramos, lo que hace un peso total superior a las referidas 16.4 toneladas, se dijo.

  Además se explicó que la base está sujeta a la explanada por losa nervada de 50 centímetros de espesor, la cual se ha deteriorado, debido al desgaste natural de los materiales, por el tiempo transcurrido y el peso del monumento y su base “lo que ha causado problemas de tipo estructural que ponen en peligro tanto al propio monumento como a la explanada del Centro Cultural Tijuana”, se dijo en comunicado.

  Sobre los dictámenes se especifica que son tres, emitidos por entidades diferentes y en fechas distintas, que obran en poder del Centro Cultural Tijuana.
 En uno de éstos, realizado por el ingeniero Gustavo Hernández Lee, del Bufete de Diseño Estructural, emitido el 24 de enero de 2008, se establece que “en las zonas donde se encuentra el monumento a Cristóbal Colón… [se detectó] a) corrosión de acero de refuerzo; b) degradación del concreto; c) fisuras y grietas en losas, trabes y nervaduras”.

  De igual forma el dictamen del ingeniero civil en estructuras Luis Eduardo García Espinosa, del despacho García & Asociados, emitido el 5 de julio de 2011 asienta el riesgo que existe. García es perito especializado avalado por la Dirección de Administración Urbana del XX Ayuntamiento de Tijuana, en oficio número 1072119, de fecha 1 de marzo de 2011.

  El ingeniero García Espinosa advierte en su conclusión que “la losa nervada que se encuentra bajo el monumento tiene daños y su acero expuesto a humedad se encuentra en proceso de corrosión”.

  Añade que “El peso del monumento está causando más deflexión a las nervaduras y la losa de compresión la está fracturando, por lo que se deberá remover el monumento y ubicarlo en otra parte para evitar más daño a la losa nervada. Posterior a la reubicación del monumento se deberá de reparar estas nervaduras con cualquier sistema. […]  Es importante tomar las medidas de seguridad para esta zona y evitar cualquier percance”.

  Por su parte,  la Dirección de Administración Urbana del XX Ayuntamiento de Tijuana dictaminó el 14 de julio de este año que “los daños que presenta la losa, nervaduras y trabes de la estructura de la zona afectada, debido a que fueron expuestos a filtraciones constantes de agua, por larga temporada, por lo que es de suma importancia se realicen trabajos correctivos a la estructura e instalaciones a la brevedad posible así como se le informa que bajo ninguna circunstancia deberá utilizar la zona, debiendo delimitarla para evitar el tránsito peatonal y riesgos innecesarios”.

  Este dictamen es firmado por la titular del área, arquitecta Mirta Yolanda Valenzuela Zamorano, según  oficio A.E.-A.T.D./069/11, del 14 de julio de 2011.
  Ante esto, se dijo que el CECUT estableció contacto con representantes del Círculo Italiano para informar de este deterioro y de la necesidad de reubicar el conjunto escultórico, de acuerdo a los dictámenes ya establecidos.

  Aclara el Centro Cultural que previo a su reubicación, se le ha removido para restaurarlo, antes de establecerlo en donde quedará de manera definitiva, garantizando que donde se determine, el citado monumento “contará con un espacio digno, a la altura del motivo por el que fue erigido”.