Periodistas siguen el debate

*.- Farsante y mentiroso, se acusan ambos
*.- Canallita le dice AMLO a Anaya 
*.- El bronco por expropiar Banamex 
*.- Meade también lanza golpes

DORA ELENA CORTÉS
[email protected]

TIJUANA BC 20 DE MAYO DE 2018 (AFN).- El mensaje que subió a sus redes Ricardo Anaya Cortés, previamente al inicio del segundo debate presidencial, y que por cierto le fue muy criticado porque aparecía golpeando una “pera” de boxeo vistiendo camisa de manga larga, en realidad era un aviso de lo que pretendía hacer dentro del foro de la Universidad Autónoma de Baja California, o sea golpear sin piedad al candidato de Morena, Andrés Manuel López Obrador, aunque aseguraba que se estaba “relajando” antes de ese encuentro.

De hecho, el candidato de la alianza “Por México al Frente”, Ricardo Anaya fue a provocar al representante de “Juntos Haremos Historia”, y hasta en forma intimidatoria se le plantó enfrente, a pocos metros de donde se encontraba, para confrontarlo, sin embargo, tras la sorpresa inicial, López Obrador reaccionó lanzando una broma, ya que se sacó la cartera de una de las bolsas de su pantalón y simuló que la protegía contra su pecho, advirtiendo que no se la fuera a robar.

Y aunque Anaya volvió a mostrar en varias ocasiones dominio del escenario, no resultó ser lo bastante contundente como en el primer debate celebrado en la Ciudad de México, ya que por momentos se fue desdibujando; pareciera que al no calcular que el tabasqueño le pudiera responder como lo hizo, esto llegó a conmocionarlo, aunque nunca perdió la sonrisa que siempre le acompaña, pero sí por momentos le subió el color a las mejillas.

De López Obrador, habrá que señalar que hubo instantes en que pareció furioso, haciendo pensar que llegaría a perder el control públicamente, sin embargo buscó retomar la calma y le asestó al panista los más fuertes golpes, como cuando presentó la portada de la revista Proceso, en la que aparece junto con su esposa, y en la que se habla acerca de su casa en Estados Unidos; Anaya reaccionó mostrando otros ejemplares de la misma revista, en las que aparecen el propio López Obrador y José Antonio Meade Kuribreña, sin embargo se le había acabado su tiempo y ya no pudo elaborar.

Antes, el representante de la alianza de Morena, Partido del Trabajo y Partido Encuentro Social, había agredido verbalmente a Ricardo Anaya llamándolo mentiroso y farsante, epítetos que le devolvió el panista. En otro momento López Obrador, lo llamó: “Ricky Riquín… canallita”.

“El farsante, reviró Anaya, es López Obrador… Ya conozco el numerito”.

Repuesto de los golpes del ex jefe de la Ciudad de México, Anaya Cortés, trató todavía de provocarlo diciéndole: ¡serénate! También en dos momentos le advirtió a López Obrador, que su problema no era la edad, sino las ideas antiguas que tenía, por lo que le demandó que se actualice.

*.- El bronco por expropiar Banamex

El que se volvió a volar la barda con sus ocurrencias, aunque en la entrevista en el programa Tercer Grado afirmó que no son éstas, fue el gobernador con licencia del Estado de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” quien ahora sugirió que podría expropiar Banamex, el banco que fue adquirido por Citi, como una medida de presión para el presidente de aquel país, Donald Trump, si es que éste presionaba a su vez, para afectar a México en caso de que se le confrontara en busca de un trato respetuoso y digno.

El candidato independiente, antes de reconocer esto ante la insistencia de la moderadora Yuriria Sierra, le dio muchas vueltas al tema, sin embargo terminó aceptándolo, lo cual se sumaría a su otra “ocurrencias” de “cortar manos” a aquellos que roben en México, cosa que ahora sólo comentó una vez. Rodríguez Calderón también la emprendió en contra de López Obrador, aunque por momentos también arremetió en contra de los otros dos candidatos para presentarse ante los millones que siguieron el debate, como la única opción para manejar este país, haciendo notar que “éstos se están peleando y lo seguirán haciendo”; Al parecer pronto se le terminaron sus bravatas que han sido repetitivas a lo largo de la campaña, aunque su participación le dio el “humor” que necesitaba este ejercicio cuando la situación se empezó a poner tensa, a tal grado que parecía que ahora sí los embates en contra de López Obrador, iban a terminar en un “rosario de Amozoc”.

Rodríguez Calderón pretendió que de nueva cuenta sus opositores firmaran un acuerdo mediante el cual renunciaban a los recursos oficiales que les entregan, aunque se dirigió hacia el candidato de Morena, y en un momento dado, con su habitual risa socarrona instó a López Obrador para que le diera un abrazo a José Antonio Meade, y el de Morena, ya riendo, concedió a la petición e hizo ademán de un abrazo, mientras volteaba hacia el priísta, para luego dirigirse a y darle la mano en un saludo, lo mismo que hizo con el panista Anaya Cortés, aunque repitió que cuidaría su cartera. Al salir del evento, y al hablar con los periodistas, ante éstos, Amlo exhibió la misma, para demostrar que la “cuidó bien”. El Bronco alardeó que ninguno lo atacaba a porque no tenían con qué, sin embargo nadie le respondió que era porque está al final de las encuestas.

*.- Meade también lanza golpes

El que sorprendió porque ahora fue más decisivo que en el primer debate, y hasta lanzó fuertes golpes, fue el candidato priísta José Antonio Meade Kuribreña, aunque quien sabe qué tanto le ayudará en su carrera por la presidencia de la República esta participación, que también se centró más en el candidato de Morena, aunque igual le dio su repasada a Rodríguez Calderón.

Uno de los golpes contundentes se lo conectó al panista, cuando al hablar sobre seguridad y crimen organizado transfronterizo, señaló que en cuestión de “lavado de dinero”, Ricardo Anaya sabía muy bien del tema, porque se encontraba dentro de éste. Luego le recriminó que se necesita ser “muy cínico, muy cínico” para haber sido Presidente de la Cámara de Diputados, encargado de las interparlamentarias sin haber logrado un solo resultado en beneficio de los migrantes; para venir aquí a pontificar; se necesita ser muy cínico también para no conocer de Atlanta más que donde vivía la familia sin haber visitado una sola vez a los consulados o a los migrantes.

Anaya le respondió que: “Hay una cosa que es peor que los engaños y es la hipocresía. Van dos veces que se refieren a Atlanta, lo que no dice José Antonio Meade, es que él se fue a estudiar a Estados Unidos pagado por el Gobierno Mexicano, y lo que tampoco dice López Obrador es que su hijo estuvo estudiando en España; ¿pues no que muy nacionalista? los dos son unos hipócritas.

A López Obrador lo “conectó” cuando leyó lo de la exigencia que la ahora candidata al Senado por Morena, Nestora Salgado hacía para el pago de $5,000 pesos por la devolución de una persona secuestrada; aquí el de Morena, enmudeció. Y le advirtió: Eso queda en tu conciencia..

*.- Moderadores agresivos y protagónicos

No obstante que Yuriria Sierra y León Krauze, moderadores del segundo debate presidencial no fueron groseros con los candidatos, si me parecieron algo agresivos, y protagónicos, aunque pudieron presentar en forma más estructurada y con interés periodístico, las preguntas bastante elementales que les hicieron los ciudadanos seleccionados, en algunos casos con mucho nerviosismo, como una señora de nombre Teresa Reynaga, quien les preguntó sobre cómo proteger a los migrantes de los abusos policiacos en ambos lados de la frontera, que cotidianamente observa, al vivir muy cerca de la línea internacional.

Y aunque todos contestaron lo que siempre han dicho en materia de migración, no fueron más allá de lo que normalmente han dicho las autoridades en este sentido; el priísta introdujo otro tema interesante en este aspecto, al hablar de los abusos de los empleados aduaneros, no obstante que la pregunta era, por lo que se observó, sobre lo que viven quienes pretenden cruzar la frontera sin documentos, y no lo que ocurre en los cruces oficiales, que son donde se enfrentan los ciudadanos a los oficiales aduaneros. En este caso El Bronco habló de quitarlos a todos los que actualmente trabajan en esas oficinas.

Regresando a los moderadores, si bien es cierto que tenían la encomienda de reconducir los temas y evitar que los candidatos “agarraran monte”, la verdad es cierto que hicieron gala de innecesaria rudeza para exigir a los aspirantes que les dejaban concluir sus preguntas, o para acallarlos cuando apenas estaban llegando al final de su tiempo concedido. En este aspecto me parecieron mucho mejor los moderadores del primer debate realizado en la capital de la República.

Sobre la frontera, el que efectivamente parece conocerla mejor  fue el candidato tricolor, José Antonio Meade, cuando Yuriria le señaló que el de la migración era un tema que nos afectaba mucho, pero más que decirlo por el hecho de que las fuertes corrientes migratorias que se están dando a esta zona de inmigrantes nacionales y extranjeros, así como de deportados de Estados Unidos, ella se refería a que es un fenómeno en el que los fronterizos nos vemos involucrados de manera directa.

Al respecto José Antonio Meade advirtió que la frontera norte de México no tiene una vocación de migración, sino que es una sociedad fronteriza, con un mayor dinamismo, capacidad de emprender, y a la que mucho se le tiene que aprenderle en el resto del país, por lo que señaló que debe ser fortalecida. 

El debate inició con un casi simultáneo sismo que estremeció la Ciudad de México, con una intensidad de poco más de cinco grados, por lo que los actores en este debate debieron sentirse muy aliviados de encontrarse a tres mil kilómetros de distancia.

PD.- Tu problema no es la edad… No entiendes el mundo: Anaya a López Obrador.

PD1.- Ricky Riquín canallín, un proceso corruptor el de este señor, engaña tontos: AMLO a Anaya.

PD2.- Lavado de dinero… Anaya conoce bien desde el otro lado en la ecuación: Meade.

PD3.- Y aunque podríamos considerar que de nueva cuenta López Obrador sale sin “lesiones que tardan más de 15 días en sanar y que requieren de hospitalización”, tal parece que en ocasiones no comprende las preguntas o no está concentrado, ya que no responde (ni siquiera con evasivas) lo central de los cuestionamientos.

PD4.- Esto lo vimos cuando se le pidió que les dijera en concreto cuál sería el factor para “medir el respeto” del gobierno de Estados Unidos hacia México, y el abanderado de Morena, respondió: “con autoridad moral”.

PD5.- Y en abono de los candidatos podríamos decir que es difícil que con una simple respuesta de apenas unos minutos puedan establecer una estrategia concreta de cómo responder ante una agresión del gobierno de Donald Trump, ya que no se puede decir simplemente: “romperemos” con aquella administración o que les cerraremos las puertas, ya que eso no es realista.

PD6.- Por cierto el presidente norteamericano Donald Trump fue prácticamente el personaje central de los comentarios de los candidatos y de los moderadores durante la primera etapa del debate, que de nueva cuenta fue seguido por millones de mexicanos, lo cual resulta muy importante destacarlo, haya sido, la que haya sido, su motivación para verlo.

PD7.- José Antonio Meade habló de diplomacia e hizo notar cómo a pesar de todo, las negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio continúan cuando el Presidente Donald Trump ha cancelado otros acuerdos internacionales; Ricardo Anaya reiteró el que se cometió un gran error cuando el presidente Enrique Peña Nieto invitó al ahora mandatario estadounidense, en tanto que López Obrador se pronunció por la amistad y respeto mutuo, pero con dignidad. El Bronco anunció que habrá que comprar en otra parte, y luego deslizó su sugerencia de expropiar Banamex.

PD8.- Andrés Manuel siguió hablando de la “mafia del poder”; José Antonio Meade sobre “cerrar las brechas”; Anaya sobre su propuesta de aumentar a $100 pesos el salario mínimo y El Bronco de acabar con el asistencialismo. Luego el neolonés “inventó” una palabra cuando dijo que se necesita “reincersar”, seguramente por decir reinsertar.

PD9.- Y como si fuera la “feria” de los buenos deseos, El Bronco habló de un salario mínimo de $335 pesos y López Obrador ofreció, además de bajar el IVA al 8%, “aumentar al doble” los salarios en la frontera. Anaya se pronunció por reducir el impuesto sobre la renta para quienes ganan menos de cierta cantidad de dinero al año.

PD10.- Pero tampoco podemos descalificar lo que los ciudadanos hicieron, ya que uno de éstos preguntó sobre los planes para diversificar los mercados para los productos mexicanos, en caso de que no se concrete el Tratado de Libre Comercio, y otro a grandes rasgos confió su historia, señalando como tras haber sido deportado, ahora está trabajando varias horas del día en esta frontera y ganando mucho menos de lo que obtenía en el vecino país.