*. - La violencia dentro de las elecciones
DORA ELENA CORTÉS
[email protected]
TIJUANA BC 9 DE JUNIO DE 2021 (AFN). – Hace un par de días comentamos con ustedes acerca de los ganadores y grandes perdedores de la contienda electoral 2021 y referíamos, además, cómo es que el actual gobernador Jaime Bonilla Valdez habría logrado entregarle al presidente Andrés Manuel López Obrador un Estado en el que su proyecto “morenista” arrasó al mantener la gubernatura, los cinco municipios de la entidad, y lograr “carro completo” en el Congreso del Estado, tras el triunfo de sus 17 diputados.
Ahora corresponde hablar sobre la función realizada por la oposición y, entre estos, los empresarios que no estaban con Morena, ya que tuvieron una participación -activa- en los comicios locales -como en todo el país- en su intento de sacar del gobierno de la entidad todo aquello que recordara a Jaime Bonilla, y al movimiento de la “cuarta transformación”. Eso los hermanó con los partidos opositores al partido guinda.
Una reflexión del prominente panista Gustavo Madero, admite esa intención al decir: “los que queríamos frenar a Morena tenemos muy poco que celebrar. Agregó que “no le quitaron nada”, porque no lo tenía, y después advierte que el bloque pro-AMLO “logró 275 curules que le significa una mayoría suficiente para aprobar todas las leyes y los presupuestos que quiera”.
Explicó que para cambios a la Constitución habrá de requerir 59 votos adicionales “que dice el presidente poder obtenerlos con el PRI y MC” y, remata afirmando que “Morena arrasa en las gubernaturas, ya que ganó 11 de 15 elecciones”.
Sin embargo, los empresarios ni la oposición tuvieron la visión -o tal vez la humildad- de despojarse de protagonismos y se dividieron (dividiendo así el voto de quienes no estaban con Morena), entre los candidatos del Partido Encuentro Solidario, con Jorge Hank Rhon (a la cabeza) y de la alianza PAN, PRI, PRD, con Lupita Jones Garay, como su abanderada.
No me queda claro si Jorge Hank Rhon, con toda la oposición respaldándolo, como era la idea original de algunos, le hubiese ganado la partida a Jaime Bonilla (aunque hay quienes afirman que ni así), considerando que el gobierno de la 4t sigue teniendo un fuerte respaldo popular, pero lo que sí parece ser cierto es que, como lo argumentaban sus seguidores, el expresidente municipal de Tijuana, propietario de la empresa Caliente, era el candidato “natural” para esa oposición, por la presencia que, buena o mala, tiene en la entidad.
Sólo basta ver cómo, con su solo nombre, Jorge Hank creció exponencialmente a un partido que estaba caído y, que no pintaba para tener gran protagonismo en esta elección 2021, a menos de que consiguiera la candidatura de Julián Leyzaola Pérez para la presidencia municipal de Tijuana.
Por un momento, algunos pensaron en una “dupla” fuerte que, se haría precisamente con Leyzaola Pérez y Jorge Hank, sin embargo, hay que reconocer que el gobierno de Jaime Bonilla logró frenar esa posibilidad y, ni siquiera por algo que su gobierno hubiese promovido, ya que sólo fue sacar del “archivo muerto” de la pasada administración, las averiguaciones penales que le armaron a Leyzaola desde el gobierno panista de Kiko Vega, con la misma intención de no dejarlo participar en unos comicios, sin atreverse -finalmente- a hacerlo.
Para esta elección, la primera concurrente de Baja California con las federales, empresarios y políticos empezaron a dialogar y, pusieron en marcha un movimiento que tenía como propósito el enfrentar la fuerza de la 4t, colocando -según dijeron- candidatos con buena imagen, con arraigo, con reconocimiento del pueblo, para “ganarse su voluntad”, sin embargo, según fueron avanzando los tiempos, y ante la posibilidad (que consideraron fuerte) de sacar a Morena empezaron a surgir las ambiciones, y cada quien se fue por su lado.
El partido de Acción Nacional se negó rotundamente a entrar a una alianza donde Jorge Hank fuese el candidato a la gubernatura, y la dirigencia nacional del PRI -con gran malestar de muchos de sus seguidores en esta entidad- le dio la espalda al “Xolo mayor” y, firmó una alianza para llevar como candidata a una mujer, como finalmente lo hicieron.
Jorge Hank -y su grupo- molestos por lo ocurrido, se pusieron a la tarea de convencer a un partido que aceptara al exalcalde como su candidato, y así empezó un peregrinaje que, finalmente terminó con el acuerdo que se estableció con el partido confesional de Hugo Éric Flores Cervantes, que ya en una ocasión había perdido el registro de su partido.
Por su parte, PAN, PRI, PRD, entraron en una serie de discusiones y llegaron al acuerdo de que, aunque azul, le correspondía la gubernatura por ser el partido -hasta ese momento- mejor posicionado en Baja California, de los tres mencionados.
Luego entró en escena el exdirigente Nacional de la Coparmex, Gustavo de Hoyos Walther, quien desde ese organismo cúpula empresarial se enfrentó, no solamente al gobernador de Baja California sino también al mismísimo presidente de la república, y ya fuera de la presidencia de esa cámara, representando a un organismo de la sociedad civil, Sí Por México (que según esto sería plataforma para que él mismo busque la presidencia de la República en 2024) sugirió los panistas que aceptaran a la ex Miss Universo 1991, Lupita Jones Garay, como la abanderada en este Estado.
En principio, con cierta reticencia aceptaron, pero cuando vieron la cobertura nacional e internacional que logró la mexicalense, tanto ellos como sus seguidores se llenaron de esperanza y creyeron que podían lograr más allá de la gubernatura, y empezó la rebatinga por el resto de las posiciones en juego, principalmente aquellas que por sí mismas, permiten un espacio de representación a sus titulares, aun perdiendo.
Pero, así como fue de llamativa la figura de Lupita Jones. que logró varios espacios periodísticos nacionales, así fue de fugaz su brillo en el firmamento, ya que, ante la población estatal esto no cuajó, y más bien, permeó el comentario de que era una reina de belleza que nada tenía que hacer participando en política; que había abusado y maltratado a sus pupilas en los concursos de belleza nacional e internacional y, que era alguien que no conocía la entidad, ni había vivido en esta, durante los últimos 30 años.
En conclusión, su candidatura no despegó, y ese porcentaje recibido de votos, es más que nada la suma de los que aportaron los militantes de los tres partidos aliados, no obstante, la salida masiva de priistas, casi al concluir la campaña.
Los empresarios (que no están dentro de estos partidos políticos) también se dividieron, según sus filias y fobias, y más allá de promover un “voto cruzado” para beneficiar a Jorge Hank y a Jorge Ramos, no hicieron nada en concreto, más que quejarse en redes o hacer grandes reflexiones que nunca se tradujeron en acciones concretas.
El voto cruzado que tanto se empeñaron en negar, se puede confirmar con el número de sufragios obtenidos en Tijuana por Jorge Ramos Hernández, candidato panista a la presidencia municipal (registrado por el PRD), a diferencia de los conseguidos a nivel Estatal, por su candidata Lupita Jones Garay.
Ahora, el contacto que empresarios, profesionistas, y representantes de otros sectores -también molestos con Morena- tuvieron, no se puede decir que fallaron del todo, ya que generaron que un mayor porcentaje de las clases media y alta en Baja California salieran a votar el 6 de junio, generando fuertes e impresionantes filas, sobre todo en las Casillas (fifí, les diría AMLO) de la entidad.
A tal grado llamó la atención, que este sector históricamente apático (en una gran mayoría) saliera votar, que alguien dijo que se notó la diferencia “al imponerse los votos para la oposición, desde la zona Oeste (la vieja Tijuana) hasta la 5y10, y de ese crucero hacia toda la zona Este, por la cuarta transformación.
Y la prueba de que no acostumbran a ser más proactivos, o ir a la ofensiva, es el hecho de que, apenas transcurridas las votaciones, al día siguiente algunos de esos grupos se disolvieron y, en otros empezaron a despedirse, con la promesa de reencontrarse -por ese canal- en 2024.
No han entendido que, si quieren acabar con un proyecto, ya sea este o cualquier otro, los sectores inconformes tendrían que estar trabajando día a día, al margen de procesos electorales, ya sea mediante esas campañas de concienciación o, con actividades directas con el pueblo y, no solamente en épocas de campaña.
Ese fue el error del PRI -y del PAN- partidos a los que "botaron" las mayorías, en los recientes años: No hacer proselitismo permanente.
Que recuerden que así, operando diariamente, ganó la presidencia de la República Andrés Manuel López Obrador, después de varios años fallidos, y así les ganó -en esta ocasión- Jaime Bonilla Valdez.
*. - La violencia dentro de las elecciones
El tema de la violencia, presente en la jornada electoral -del pasado domingo 6 de junio- es algo que no se puede dejar así porque debe evitarse a toda costa que vuelva a ocurrir.
En esta ocasión, no se trata solamente de urnas robadas, casillas quemadas, unidades de transporte destruidos que, también se dio ahora, o de “mapaches” robándose la elección, sino que subimos de tono y, ahora, fueron dejadas cabezas cercenadas -en por lo menos dos casillas del Este de la ciudad- así como restos humanos.
Al respecto, sólo la fiscalía nos ha hecho saber que ya se abrieron carpetas de investigación y que esos restos habían sido “congelados” para ser utilizados en esta ocasión, con el propósito de inhibir la elección, en tanto que el gobernador Jaime Bonilla Valdez, sugirió que la violencia había sido provocada por el candidato a la gubernatura de la entidad Jorge Hank Rhon, señalando con suspicacia, que cada que este hombre aparece en elecciones estas cosas suceden.
Pero al margen de que se nos demuestre qué ocurrió, porque las investigaciones no pueden parar, intentaré dos teorías, aunque ya sé qué siempre habrá a quienes no guste lo señalado.
Por una parte, históricamente, han sido los partidos en el poder los que han generado la violencia, sobre todo, cuando tienen claro que la población les ha dado la espalda y sus candidatos serán repudiados, así es que hacen uso de todas sus artimañas para evitar que el voto contrario llegue a sus opositores.
Así es que, de inmediato, ante lo ocurrido el pasado domingo surgieron voces que apuntaron hacia la administración actual, y luego, políticos que sugirieron (para ver quién lo cachaba), que la administración “morenista” trataba de “reventar” la elección para evitar perder el poder.
Sin embargo ¿qué pasa cuando los grupos opositores (también con fuerte poderío económico) están seguros de que, con todo y lo que hicieron, la votación no les alcanzará?
Unos y otros siempre pudieron medir el posicionamiento de sus candidatos en esta contienda, unos con más herramientas que otros, para realizar los famosos "Tracking", diarios, y unos y otros siempre supieron hasta dónde llegarían.
En la oposición, estaban esperanzados de que la gente saliera a votar en tropel para desterrar a Morena, sin embargo, desde un principio se vio que esto no sería así, aunque sí habría mejorado su participación.
Pero en los últimos días de la campaña se vieron desesperanzados porque los números que tenían frente así no era nada alentadores.
Entonces hay quienes piensan que ante una situación de esa naturaleza lo mejor sería que se suspendieran las elecciones, para tener un año más -como mínimo- de preparación.
Por lo tanto, si parafraseamos las novelas policíacas, entonces, diríamos que hay “más de un sospechoso”.
El gobierno podría ser, aunque se estaría arriesgando a boicotearse este mismo, sobre todo, cuando siempre tuvieron la certeza de que obtendrían carro completo y precisamente con el porcentaje con el que concluyeron.
Y el otro sospechoso, podría ser el poder económico o los grupos políticos hechos a la usanza del antiguo régimen (priista), el que bien dijo Jorge Hank, que fue el que inventó las "mapachadas", aunque luego haya aclarado que los panistas las aprendieron, y los morenistas las perfeccionaron.
O ¿qué dicen ustedes? Este es un caso para Sherlock Holmes o Agatha Christie.
Más bien, es un caso ¡para la araña!...
ANA Y CONDA. – ¡Ay! Estos niños, Andresito y Ricardito peleando; no vayan a terminar llorando y acusándose mutuamente con sus mamás o abuelitas.
PD. - “Y mi papá es más fuerte que el tuyo” … y “el mío es bombero y te pega con la manguera”.
PD1.- En cambio, a nivel nacional, e incluso aquí en Baja California, hemos visto respuestas de mayor madurez ante lo sucedido el 6 de junio.
PD2.- Hasta Jaime Martínez Veloz, acostumbrado a pelear y a ser muy explosivo, ahora simplemente reconoció su derrota y no culpó específicamente a nadie.
PD4.- Por cierto, muy seguramente lo veremos -de nueva cuenta por estas tierras- en 2024, cuando habrá nuevas elecciones.
PD5.- El que al final dio un mensaje más acorde a su personalidad, fue el excandidato al gobierno de Baja California Jorge Hank Rhon, quien no solamente reconoció ayer su derrota, sino que confirmó que el “gran perdedor” en el caso de su campaña, fue él.
PD6.- No salió a culpar a nadie, aunque sí recordó vagamente su pasada participación, al volver a sugerir una “traición” de Fernando Castro Trenti, aunque no lo nombró, pero ahora -dijo- que él (Hank) y, nada más que él, fue el responsable de esta derrota.
PD7.- Definitivamente, el que se lleva el “premio especial” en esta campaña, es el Partido Encuentro Solidario, que no solamente pierde el registro, sino que se reveló como el peor operador de una campaña política.
PD8.- Y así como pretenden poner a Jorge Hank en el registro de agresores de mujeres, por razón de violencia de género, a los directivos del PES los deberían de poner en otro registro público nacional, para que quienes deseen contratarlos para procesos posteriores, sepan a lo que se pueden atener.
PD9.- De la “saga” de los “Eligios” (familia de políticos y de medios) que usted conoce muy bien, aparece Carlos Eligio Carreón Valencia, nieto del “patriarca” de la dinastía.
PD10.- Y me refiero a que Carreón Valencia aparece en este momento político, no porque sea una revelación, ya que ha logrado incrustarse en gobiernos de diferentes colores, sino porque sabe recapacitar a tiempo.
PD11.- En su muro, antes de las elecciones, Carrión Valencia actualizó su foto de portada con una en la que se observa al panista Jorge Ramos Hernández, en un evento de campaña -por la presidencia municipal de Tijuana- y ahí, Carlos Enrique escribió #jorgeramos #PRD, seguido de una línea que declaraba: distrito 9 #CECV #nosvaairbien
PD12.- Sin embargo, algo pasó (no sabemos qué), porque de su perfil en Facebook “desaparecieron” todos los mensajes partidistas de apoyo a esta coalición y al exalcalde, pero el reportero del barrio logró rescatar este.
PD13.- Y tal parece que sigue como director de Participación Ciudadana en el IMPAC, dentro del actual ayuntamiento de Tijuana.
PD14.- Pero en una publicación que dirige y promueve, y que se denomina “El Legado”, difunde el cierre de campaña de Jorge Ramos asegurando que: “es un hombre de experiencia y resultados”.
PD15.- Sí era Salomón Faz quien desayunaba hace unos días en el Campestre, ya que en su aparición -este día- en “la mañanera” de Jaime Bonilla, su barba y bigote, así como patillas, efectivamente los luce de color entre gris y blanco.