Por: Dora Elena Cortés
TIJUANA BC 27 de noviembre de 2011 (AFN).- Y ahí vamos…
Autoridades mexicanas y particularmente las de los estados que conforman la llamada “Ruta Maya”, calculan que para el año próximo, alrededor de 12 millones de turistas de todo el mundo visitarán el sureste del país.
Estiman que llegarán atraídos por las predicciones mayas, una de las cuales –la principal- ha sido “traducida” como el “fin del mundo” para el 21 de diciembre de 2012, aunque destacados “mayólogos” afirman que no es así sino que el final del calendario indígena en esa fecha, habla “del fin de una era y el inicio de otra”.
Pues bueno, antes de que ese “mundo” de visitantes sature las calles, caminos y hoteles de los estados de Oaxaca, Chiapas, Campeche, Tabasco, Yucatán y Quintana Roo, o “antes de que se termine el mundo”, decidimos hacer un viaje por algunas de esas entidades (que no todas) para observar la magnificencia de sus vestigios y conocer la vida de los descendientes de ese importante pueblo que sin las técnicas, equipo, materiales y avance tecnológico, hicieron grandes edificaciones y dejaron para la posteridad, parte de su sabiduría.
Nuestro recorrido inició en el estado de Oaxaca, siguió a Tuxtla Gutiérrez, en Chiapas; posteriormente a San Cristóbal de las Casas y Palenque, en la misma entidad para de ahí pasar a Mérida y Chichén Itzá en Yucatán, finalizando en Cancún Quintana Roo.
Iniciamos con un vuelo de Tijuana a Oaxaca y realizamos nuestro regreso desde Cancún a Tijuana por la empresa Volaris, que se precia de garantizar su puntualidad en cada vuelo, con la mala suerte de que en el camino de retorno, se pasó el aterrizaje, de la media hora ofrecida como “tiempo razonable” para cumplir, por lo que ya nos avisó la empresa que contamos con parte de otro boleto “personal e intransferible” para cualquier otro vuelo que debemos hacer antes de 90 días.
Al margen de eso, el servicio en esa línea aérea (que hace muchas ventas y promueve interesantes ofertas por Internet), es bueno y sus aviones cómodos, por lo que estimamos que en general cumplieron con lo que se nos ofreció.
Para los traslados internos por los estados visitados, nos inclinamos por hacerlo a través de autobuses de transporte federal de pasajeros, a fin de evitar problemas de inseguridad en las carreteras, influenciados por todo lo que se informa de asaltos y robos a los visitantes. Finalmente nos sorprendimos al comprobar que en todos los lugares recorridos se respira un aire de tranquilidad, la seguridad es impresionante y los retenes de policías federales, locales y militares se repiten por casi todas las carreteras del sureste del país.
También en Internet encontramos una empresa cuyas iniciales ADO anuncian el servicio de la empresa Autotransportes del Oriente, que ofreció a precios accesibles los traslados requeridos y la contratación de hoteles que resultaron generalmente buenos.
Luego nos dimos cuenta que prácticamente ADO es un monopolio en el sureste del país, ya que no hay otras líneas que cubran la mayor parte de esas rutas y las que hay (de primera y segunda clase) son de la misma empresa o de otra (Autotransportes Colón) que corresponden a los mismos dueños.
En algunas plazas tienen servicio propio de taxis; traslados a aeropuertos e inclusive servicio de Ferri para ir a Belice. ADO se distingue por su puntualidad, su buen servicio; por unidades cómodas de transporte (con servicio de Internet durante el camino) y por buen servicio a través de su empresa turística Boletotal, donde nos atendieron (y se hicieron cargo de nuestro viaje) la señorita Elizabeth García y el supervisor Rodolfo Escalante, quienes siempre estuvieron atentos a resolver todas las incidencias que se presentaron, destacando por atención amable y puntual.
Al igual que Volaris podríamos recomendar a la empresa ADO, de la cual sólo podríamos decir que falta más atención por parte de algunos –sólo algunos- de quienes atienden en las terminales camioneras, como en el caso de Oaxaca, donde nos recibió una impaciente jovencita que hacía su trabajo conforme “el librito” pero que parecía poco dispuesta a escuchar lo que le comentábamos al no recibir algunos boletos que se nos dijo que serían entregados ahí para continuar nuestro viaje.
El recorrido que nos marcamos, nos permitió visitar, además de algunos centros ceremoniales, varios de los pueblitos que se encuentran en los alrededores de las comunidades elegidas; conocimos de las costumbres de sus habitantes; disfrutamos de sus comidas y bebidas; sufrimos climas sumamente calurosos y húmedos, en la mayor parte del trayecto, hasta lluviosos y fríos como en el caso de San Cristóbal de las Casas Chiapas.
No pudimos visitar Tabasco –que podría ser en posteriores fechas, si no se termina el mundo- pero el gobierno federal decidió que en esa entidad inicie oficialmente la ruta “Mundo Maya 2012” con la reapertura del museo Carlos Pellicer Cámara, que se tiene previsto ocurra precisamente el 21 de diciembre de 2012, cuando iniciará “la cuenta regresiva” hacia la misma fecha del año siguiente.
Las particularidades de los lugares visitados las iremos comentando en posteriores reportajes en los que habremos de transmitir –de la mejor manera posible- todo lo que vimos, vivimos y disfrutamos.
Encontramos atención respetuosa y servicial en los lugares recorridos; conocimos pueblitos pintorescos donde las tradiciones se mantienen; disfrutamos de ciudades coloniales donde las reglamentaciones impiden –como sucede en otras ciudades del centro del país- que se modifiquen fachadas o se instalen grandes espectaculares o carteleras que cambiarían la imagen de esos lugares ancestrales y nos impresionamos con el trato amable de policías y honesto de taxistas.
Difícil creerlo ¿verdad?
En esos lugares del México lleno de historia, encontramos pueblos donde la limpieza y el orden sorprenden y poblados y ciudades donde se realizan obras para mejorar las condiciones urbanísticas y recibir a un mayor número de visitantes.
En fin, el México donde la vida prehispánica se hace presente y donde la colonial sigue prevaleciendo, como testigos mudos de lo que una vez fuimos en este país.
Los invitamos a seguir nuestra serie que publicaremos semanalmente, dentro de nuestra nueva sección de Turismo.