TIJUANA BC 26 DE ABRIL DE 2012 (AFN).- Para Wilfrido Terrazas, “la música tiene la virtud de poder generar un cambio en el mundo”; y como prueba, hoy por la noche el puerto de Ensenada será testigo de ello durante su participación en el concierto  Ritmo y sabor Latinoamericano.

La Orquesta de Cámara de Ensenada (OCE) trae para Baja California, como parte de su itinerario denominado Grandes Solistas, en su temporada Marzo Junio de 2012, al músico flautista y compositor, Wilfrido Terrazas, quien se presentará este jueves a las 19:30 horas en el hotel Coral y Marina, del puerto.

Entrevistado por Agencia Fronteriza de Noticias (AFN), el músico oriundo del  municipio conocido como “La Cenienta del Pacífico”, confesó que para él es “grato, interesante, novedoso y muy especial” regresar a su tierra natal, lugar donde dijo se dio el primer encuentro con el arte desde temprana edad.

Durante la sesión de preguntas y respuestas que el solista tuvo, junto con Álvaro Gabriel Díaz Rodríguez, amigo de antaño y director musical y de la OCE, con la reportera, habló sobre las virtudes de la música y la leyendas que existen en torno a la concepción que la sociedad tiene de ella.

- La música como vía de escape y medida preventiva para diversos problemas que enfrenta México, ¿Es posible?, se le cuestionó.

“Es posible trasformar el mundo con el arte, no espectáculos masivos, sino aquella que te permite reflexionar y que también puede ser un reflejo de tu misma situación”, afirmó Díaz Rodríguez, quien agregó que los maestros de la OCE participan con una orquesta infantil, en El Sauzal, desde hace cinco años.

Señaló que el arte también tiene la virtud de generar una consciencia, un movimiento, que "se vuelve una manera de vivir y de intentar cambiar el mundo a través de lo que sabes hacer”.

Por su parte, Terrazas puntualizó que durante su experiencia como docente de la música ha aprendido que con ella los alumnos aprenden valores que sirven para muchas otras cosas y que se viven en otros ámbitos.

“Aprenden disciplina, compromiso, responsabilidad, trabajo en equipo y sentido de colectividad, trabajan para un proyecto en común bajo ciertos preceptos y metas comunes, eso te da la música, y eso mas tarde en la vida te puede servir para un montón de cosas”, aseguró.

Por otra parte, los músicos también fueron cuestionados sobre las críticas que algunos grupos de la escena cultural, tanto locales como de otras partes, han manifestado en relación a las dificultades que un artista enfrenta para desarrollarse profesionalmente en el ámbito de la música y vivir de ella.

“No se si es suerte o destino, pero he tenido mucha suerte; creo que hay una mala idea en cuanto a este tema, las artes son como cualquier otra profesión, es muy sencillo, si lo haces bien te va bien, si no, no; o tocas afinado o tocas desafinado, las artes son muy expuestas”, advirtió Díaz Rodríguez.

En cambio, Wilfrido reconoció que sí existen obstáculos para ejercer esta profesión y garantizar un desarrollo dentro de ella, sin embargo, indicó que dichos retos son los mismos que se presentan en las demás carreras, “sí hay muchos obstáculos, pero esa es la vida, no me parece particular de la música”.

“La idea del artista sufrido es una invención histórica”, coincidieron, ya que se trata de "un personaje" que nace a partir de una visión romántica durante la época de Ludwig van Beethoven, quien hizo carrera como un virtuoso músico pese a su precaria condición de vida.

"No puedes pasarte la vida en eso, tienes que trabajar; el músico siempre está tratando de resolver cosas más apremiantes, necesidades creativas, no puedes pasarte la vida quejándote, ‘si me gane o no la beca’, siempre hay otra”, finalizó el solista ensenadense.

Díaz Rodríguez, también es director de la Fundación Redes Música y Arte IAP, un organismo artístico independiente.