El Plan “B” del PRI.
Por: Gilberto LAVENANT
Los priístas, y los no priístas, incluso los llamados apolíticos, saben que el priísta y aún Gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, es el precandidato más fuerte para la Presidencia de la República en los comicios del 2012. Su “raiting” está muy por encima de cualesquier político de los demás partidos, incluso de los del PRI.
A fines de marzo pasado, la empresa Consulta Mitofsky, hizo una encuesta en la que, sin dar nombres, aplicando la pregunta : ¿quién le gustaría que fuera el siguiente Presidente de México?, Peña Nieto obtuvo el 33 % y López Obrador, apenas un 11 %.
Así es que a unos meses de que inicie el proceso electoral para los comicios presidenciales del 2012, muchos podrían afirmar que Peña Nieto relevara en la Presidencia de la República al panista Felipe Calderón. Falta solo que pasen los comicios de 3 de julio próximo en el Estado de México y que los resultados electorales favorezcan al priísta Eruviel Avila, para que inicien los pronunciamientos a favor del aún gobernador mexiquense.
Sin embargo, por aquello de que del dicho al hecho hay mucho trecho, y de que cualquier cosa puede suceder, tal y como advierten que “del plato a la boca se cae la sopa”, y en especial por la tragedia de Luis Donaldo Colosio, en Lomas Taurinas, aquí en Tijuana, el PRI tiene preparado un Plan “B”, en el que aparece como protagonista el sonorense Manlio Fabio Beltrones Rivera.
Ambos priístas con una personalidad un tanto distinta. Uno el viable candidato y el otro el posible sustituto, en caso de que algo ocurra. Enrique, una figura juvenil, de apenas 44 años, nacido el 20 de julio de 1966 en Atlacomulco, Estado de México, cuya entidad aún gobierna, quizás no tiene la trayectoria política de Beltrones, ni el “colmillo”, pero pertenece a una familia de viejos políticos mexiquenses, tanto por parte del padre, como de la madre.
En especial, se le refiere como miembro del Grupo Atlacomulco, que según describe Wikipedia, es una agrupación de políticos mexicanos, miembros del PRI, que han tenido su campo de acción en el Estado de México y cuyo liderazgo estuvo a cargo del profesor Carlos Hank González, padre de Carlos y Jorge, ambos de apellidos Hank Rhon.
Manlio Fabio, 14 años mayor que Peña Nieto, con 58 años de edad, nacido en Villa Juárez, Sonora, con una larga trayectoria política en esa entidad en la que fungió como Gobernador, la tierra de Luis Donaldo Colosio, con un “colmillo”, largo y retorcido, es actualmente el priísta más influyente en todo el país. Ocupa el Senado de la República Mexicana.
¿Pero, quien es Manlio Fabio Beltrones Rivera ? El portal DossierPolítico.Com, en el 2006, lo describe en los términos siguientes :
“…es un político formado en la vieja escuela priísta, la de mano dura y finos tratos, la que genera desconfianza pero sabe negociar. De larga trayectoria política —tres décadas por lo menos—, sus adversarios lo tachan de “represor” o “encantador de serpientes”, en tanto que sus compañeros y ex colaboradores lo miran como “un político-político”, astuto, bien informado y de mano firme”.
Luego agrega que : “…Beltrones ha sido gobernador, diputado, senador, subsecretario de Gobernación y líder de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP). Ha sabido tejer una amplia red de relaciones que utilizará en los próximos años, coinciden sus amigos y adversarios”.
“..Discípulo del mítico político veracruzano Fernando Gutiérrez Barrios, quien, se dice, murió en sus brazos, el ex gobernador sonorense lo mismo es amigo de Raúl Salinas que de Cuauhtémoc Cárdenas; de Emilio Gamboa que de Roberto Madrazo; de Luis Colosio y de Diego Fernández de Cevallos; de los líderes de las iglesias cristiana y ortodoxa; y de casi todos los empresarios más poderosos del país, con quienes habló a favor de Madrazo en la pasada contienda electoral”, continua diciendo.
Sin embargo, advierte que “…en el camino también se ha hecho de enemigos poderosos como Carlos Salinas de Gortari, quien lo vetó para ser el presidente de su partido en agosto de 2005; Elba Esther Gordillo, quien lo acusó de haber organizado desde las “cañerías del sistema político” una campaña negra que culminó con la expulsión de la dirigente magisterial de las filas priístas; y Emilio Chuayffet, con quien disputó la coordinación de la fracción priísta en la Cámara de Diputados la pasada legislatura”.
“…Quienes conocen al sonorense –indica- lo describen como un personaje de dicotomías, de claroscuros. Se formó junto a Fernando Gutiérrez Barrios, de quien fue secretario particular y luego subsecretario en Gobernación. A él le aprendió cómo ser un buen negociador y, a la vez, tener mano dura. Es, en suma, al mismo tiempo empresario y político que ha sabido cultivar su carrera gracias precisamente a su astucia. Beltrones provoca respeto, pero también temor sobre todo por los señalamientos respecto de sus presuntas relaciones con el narcotráfico”.
Definitivamente, Manlio Fabio es un político astuto y controvertido. No niega que quiere ser Presidente de México, aunque, abiertamente, no le disputa la posibilidad a Peña Nieto. Incluso se sabe que hace “amarres”, directamente o a través de sus operadores, para el caso de que efectivamente tenga que recurrirse al Plan “B” en la carrera presidencial.
El único “pero” es que, en tanto que Peña Nieto tiene el 87 % de las simpatías del electorado nacional, Manlio Fabio, apenas alcanza un 5 %. Aún así, Beltrones sigue siendo considerado como la “Opción B” del priísmo.