TIJUANA BC 2 DE JUNIO DE 2016 (AFN).- Jacobo Sapochnick, abogado corporativo de Estados Unidos, consideró que los refugiados africanos varados en la garita de San Ysidro para poder ser aceptados en el país vecino primeramente tienen que solicitar un permiso de asilo político que a veces tarda hasta dos años en ser aceptado, dependiendo los casos de cada persona.

Tras la reunión que sostuvo con el Grupo Madrugadores refirió que en años pasado se ha visto un gran problema en la frontera donde se ha presentado el arribo de refugiados de otros países y que ello se debe a que la frontera de Tijuana es la más grande por ello se da con mayor frecuencia.

Resaltó que a las personas se les debe hacer un estudio para ver si califican para este permiso, el cual se realiza mediante una entrevista y la investigación de sus casos.

“La cosa es que tienen que venir y solicitar el asilo político, rendir toda su declaración y pasar por el proceso para calificar para que les acepten este asilo, además tienen que pasar por una entrevista y si la pasan se les da un permiso de trabajo en lo que se les arregla el papeleo, de no pasar la entrevista los regresan a sus países”, dijo.

Sapochnick dijo que el permiso tarda entre 2 años porque se evalúan los casos por los que están huyendo, aunque, agregó, cuando se trata de asuntos de tortura o persecución religiosa se resuelven con mayor facilidad y una vez aceptado el asilo las personas pueden aplicar para ciudadanía, aunque este proceso tarda alrededor de 5 años.

“Depende el problema con el que vengan los refugiados, si comprueban que es un conflicto social y político si hay oportunidad de tener asilo político, en este caso los mexicanos, por ejemplo, que buscan este asilo no se les da porque solo marcan el asunto por ‘violencia’, lo cual no es reconocido como problema social político, tienen que comprobar que vienen de un país que tiene conflicto fuerte, depende del país de donde provienes y tu historia para poder obtener el asilo”, concretó.

El problema de estas situaciones como la que se vive hoy en Tijuana, que mantienen el proceso lento y pausado, puntualizó, se debe a que el gobierno de Estados Unidos siente que entre más gente obtenga asilo muchos más vendrán a buscarlo, “por eso son un poco rígidos en sus entrevistas y en su investigación de la historia de cada individuo”.

México le hace el trabajo sucio en migración

Por su parte, Jorge Castañeda, político y ex Secretario de Relaciones Exteriores, señaló la víspera que seguramente los africanos varados en la Línea Internacional de Tijuana entraron al país sin papeles “nosotros le estamos haciendo el trabajo sucio a los estadounidenses tratando de sellar la frontera y cometiendo abusos, violaciones a los derechos humanos y negándoles el derecho de audiencia para escuchar sus peticiones de asilo”.

De acuerdo a que el Delegado de Migración señaló que entraron de manera legal, recorrieron todo el país y solamente están de paso por eso no se les molesta, Castañeda refirió que si no necesitan visa “por supuesto que pueden entrar de forma legal”, pero muchos no lo hacen así.

Reiteró que ello a final de cuentas no importa, porque “el tema es que los que están aquí son una pequeñísima minoría y la inmensa mayoría de los centroamericanos y de otros países que entran a México queriendo llegar a Estados Unidos son deportados por nuestro país a sus respectivos lugares y sin audiencia, solamente porque “ellos nos lo piden y aunque las autoridades dicen que no es cierto están mintiendo”.

El también comentarista de televisión resaltó que el Instituto Nacional de Migración (INAMI) “es de lo más corrupto que hay en México”, aunque no de ahora, sino de todos los sexenios: “Yo recuerdo muy bien desde la época que mi padre fue Secretario en los años 70 y 80, lo que se llamaba la Dirección General de Migración en Gobernación era uno de los lugares más corruptos de todo el gobierno federal y lo sigue siendo, no se ha hecho nada al respecto en 35 años”, sentenció.