TIJUANA BC 1 DE MARZO DE 2024 (AFN).- El asesinato de un niño de 7 años de edad, ocurrido el primer domingo de este 2024 en Culiacán, Sinaloa, es lo que habría provocado el enfrentamiento armado en una casa de Rincón Toscano de Cumbres de Juárez , en las primeras horas del pasado lunes 26 de febrero.
En lo que parece ser un acto de venganza por la muerte del menor, a principios de febrero un funcionario federal en Sinaloa fue “levantado”, torturado y asesinado, posiblemente por el mismo grupo que participó en el enfrentamiento armado en Tijuana, a inicios de esta semana.
Todo habría iniciado poco después del mediodía de aquel domingo 7 de enero en la capital sinaloense, cuando un grupo de hombres armados disparó contra una familia que tripulaba un vehículo Jeep Rubicón de color rojo; padre y madre salieron ilesos, no así su hijo, Cruz Ricardo, de sólo 7 años de edad, quien fue trasladado herido de bala a un hospital, donde murió cuando era atendido.
Un mes después, Jesús Héctor Gutiérrez Salazar, empleado del área jurídica de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) en Sinaloa, fue “levantado” y su cuerpo lo encontraron dos días después en un camino de terracería al oriente de Culiacán.
El cadáver del funcionario federal estaba amarrado con cinta canela y cubierto con una cobija; junto al cadáver se encontró un juguete en forma de perro, de color blanco y negro. Días después, luego de que la dependencia federal en la que laboraba había condenado el crimen, en redes sociales comenzó a circular un video en el que aparece Gutiérrez Salazar.
En la grabación se observa al funcionario vestido sólo con pantalón, esposado de las manos y con huellas de golpes en ambos brazos. 
“Mi nombre es Jesús Héctor Gutiérrez Salazar, me dicen el Kechu, soy primo de Jime Daniel Gutiérrez García, alias el Toro, principal socio de Lico Beltrán, el cual, mi primo Toro, mató a un niño de 7 años, hijo de Ricardo Beltrán”, dice el hombre que después fue encontrado sin vida, y en el video aparecen fotos de Gutiérrez García y Lico Beltrán, además de la imagen de un medio informativo con la noticia del ataque donde murió el infante, mientras se escucha el fragmento de una canción.
Según versiones extraoficiales, poco después de las 04:00 horas del pasado lunes 26 de febrero, alrededor de 20 hombres fuertemente armados trataron de asesinar a “El Toro”, en Cumbres de Juárez, sin embargo, éste respondió al ataque junto con varios pistoleros más y logró escapar.
Más de 30 horas después, cuando autoridades federales catearon el domicilio, encontraron, cuatro armas largas y tres cortas, seis mil 755 cartuchos útiles, 41 cargadores, droga, 25 celulares, nueve vehículos y 329 casquillos percutidos, como prueba de la respuesta a la agresión.
De acuerdo con una versión obtenida por Agencia Fronteriza de Noticias (AFN), en esa vivienda se encontraba un hombre identificado como Javier Quintana Castillo, apodado “El Rayo”, y supuesto compadre de “El Toro”; sobre el primero no se encontraron referencias, por el momento.
Según una nota del semanario Riodoce, editado en la capital sinaloense, Gutiérrez García, alias “El Toro”, es originario de aquella ciudad, sin embargo, radica de forma permanente en Baja California, donde tendría algunos negocios, señalando incluso que ha sido visto en diversas partes de Ensenada y Tijuana, entre estos el edificio de departamentos de lujo New City, donde se habría refugiado luego del asesinato del niño de 7 años, en Culiacán.
La nota señala además, que al menos dos negocios de “El Toro” habrían sido atacados en Baja California, casi de forma simultánea al levantón y posterior asesinato de su primo, el funcionario federal que fue videograbado cuando refiere su parentesco, en lo que parece ser una cacería hacia Gutiérrez García, en venganza por lo ocurrido el primer domingo del año, en la capital de Sinaloa.