Tijuana BC 21 de marzo de 2015 (AFN).- Mario Fuentes Luna, conocido en el mundo de la lucha libre como “el Médico Asesino” pidió que “no nos cataloguen como payasos arriba del ring” al hablar sobre la trágica muerte de su compañero Pedro Aguayo Ramírez “el hijo del perro Aguayo” ocurrida anoche en el Auditorio municipal de Tijuana, tras una patada que recibió en la nuca por parte de “El Rey Misterio Jr”.
Fuentes Luna, quien participó en la conferencia de prensa que esta tarde ofrecieron directivos de la Comisión de Box, Lucha Libre y Artes Marciales Mixtas, lamentó el fallecimiento del joven luchador, pero dejó bien sentado que esto fue consecuencia de un accidente, al que todos pueden estar expuestos: “sabemos cuándo subimos, pero no sabemos cómo vamos a bajar”, dijo al agregar que “eso puede ser muertos, como en este caso”. Luna también fue durante algún tiempo comisionado de esta organización.
En la conferencia de prensa -en la que lo mismo se respiraba nerviosismo, que molestia y consternación- el “Médico Asesino” advirtió que quienes participan en esta especialidad: somos deportistas, nos preparamos, tenemos riesgos y es la factura que luego pagamos”. Reveló que tras más de 30 años de participar en este deporte, todavía se está atendiendo de las consecuencias de golpes recibidos, sin embargo aseguró que: “si vuelvo a nacer, volvería a ser luchador”.
Pidió comprensión a los reporteros que insistían en saber si “el hijo del perro Aguayo” de 35 años de edad, perdió la vida por falta de una oportuna asistencia médica, por algún golpe previo, o porque se le sacudió la cabeza por parte de otro luchador, cuando estaba desvanecido en el ring. Insistió en que “no somos payasos”, añadiendo que lo decía con respeto para quienes sí lo son.
La conferencia de prensa fue encabezada por Juan Carlos Pelayo, presidente de la Comisión de Box, Lucha y Artes Marciales Mixtas, quien lucía bastante nervioso y por momentos desesperado por las preguntas que formulaban los reporteros. Reconoció que este deporte también es espectáculo y que en principio se pensó que el ex estrella de la WWE estaba fingiendo.
Insistió en que en este deporte “hay accidentes” y consideró que en ocasiones por “tal vez un golpe previo”, se pueden sufrir situaciones de esta naturaleza. No obstante esto aseguró que todos los luchadores son revisados en sus condiciones médicas antes de subir al ring y que en Tijuana es el único sitio donde se les practica un examen antidoping.
Refirió que el médico en turno -ahí presente- Ernesto Franco estaba en el momento del hecho atendiendo a otros luchadores que resultaron lesionados en las peleas previas, por lo que en el momento en que se percataron de que algo sucedía con “el hijo del perro Aguayo” una doctora que se encontraba sentada en una segunda fila, de inmediato le dio los primeros auxilios.
Dijo que la doctora lo atendió hasta que volvió el médico en turno y que luego fue llevado de emergencia al Hospital del Prado que se encuentra a unos metros del Auditorio.
Afirmó por otra parte, que el promotor de esta presentación, contaba con todos los permisos de las autoridades correspondientes, así como de Bomberos y Protección Civil. Inclusive recordó que se les había advertido que no empezaría la función hasta que no estuvieran en el sitio dos ambulancias, y que así se hizo hasta que llegaron presentes éstas y los paramédicos.
En la conferencia de prensa también participaron que Carlos Gopar director de Bomberos y Juan Carlos Méndez Torres director de Protección Civil, quienes confirmaron que se contaba con todos los permisos correspondientes y se cumplió con los requerimientos para una presentación de esa naturaleza.
El doctor Ernesto Franco, visiblemente consternado informó que al parecer el luchador murió por un traumatismo cervical, aunque refirió que esto lo tendría que confirmar la necropsia, la cual al parecer no se realizaría por la “dispensa” que estaban solicitando familiares para llevarse su cuerpo a Guadalajara Jalisco.
Franco, durante unos segundos no pudo continuar con su declaración, ya que se mostraba consternado y hubo un momento en que se le quebró la voz, por lo que al recuperarse aseguró que no se separó de él, y que lo acompañó en el hospital, donde desafortunadamente y tras 45 minutos de tratar de reanimarlo “lamentablemente lo perdimos”.
Antes, el comisionado de Box y Lucha Libre Juan Carlos Pelayo, también informó que tanto el doctor Ernesto Franco como la doctora Teresa Sánchez, lo estabilizaron “con una cánula” y al observar que tenía reflejos mínimos, se le trasladó al hospital mencionado, situado a una cuadra, aunque había una ambulancia las puertas del auditorio. El luchador fue ingresado a urgencias y llevado al “cuarto crítico”.
Refirió que “no hubo respuesta cardiológica ni neurológica y provino el fatal desenlace”, no obstante que informaron que Aguayo Ramírez al subir al ring estaba perfectas condiciones de salud, con una presión de 120/80. Insistieron en que no se permite que nadie participe en una lucha, si antes no se le revisa médicamente.
Sobre “el Rey Misterio Jr.” hizo saber que estaba consternado por esto que había ocurrido “en su regreso a Tijuana”. Esta función era parte de una gira de retorno de este luchador que se enfrentaba al “hijo del perro Aguayo”. Otra presentación entre ambos tuvo lugar previamente en Zapopan Jalisco.
También en la conferencia de prensa estuvo presente el promotor de este espectáculo Ignacio de la O, quien afirmó que no escatimaron en gastos para atender a este luchador, no obstante que ellos cuentan con “seguros de gastos médicos mayores”.
La Procuraduría General de justicia del Estado, a través de su agente del Ministerio Público inició desde ayer mismo las averiguaciones correspondientes, con el interrogatorio a los involucrados.