MÈXICO 7 MARZO 2017 (CIU).- En el marco del Día Internacional de la Mujer, vale la pena recordar el rol transformador de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) en el ámbito de la equidad de género. Estas tecnologías se constituyen como una herramienta clave para la consecución de la igualdad de género y, en particular, para promover el empoderamiento de las mujeres.
En el caso de México, se ha demostrado que en términos de acceso a conectividad no existe una diferencia significativa entre hombres y mujeres. De acuerdo con la Encuesta sobre “Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares” realizada por el INEGI, se registra una distribución cercana a 50% - 50% entre mujeres y hombres, incluso en la segmentación por rangos de edad. Por lo que, desde esta dimensión, prácticamente no existe una brecha de género.
Algunas estadísticas demográficas
Si bien, en la posibilidad de acceso a las TIC no existen diferencias significativas por género, en el terreno demográfico se identifican algunas métricas relevantes que revelan contrastes entre hombres y mujeres.
Por ejemplo, al segmentar la población total por género se encuentra que de un total de 122.3 millones de habitantes al cierre de 2016, más de la mitad (51.2%) son mujeres. Por su parte, en el indicador de esperanza de vida, las mujeres alcanzan un promedio de 77.9 años, es decir, viven cinco años más que los hombres¹ .
Distribución de la Población por Género, 2016
Fuente: CONAPO
Adopción de TIC entre las mujeres
La adopción de servicios y dispositivos de conectividad muestran un acelerado crecimiento en México y por supuesto, las mujeres no han quedado atrás en esta tendencia de mercado.
Al mismo tiempo que las capacidades de conectividad han aumentado, las tarifas de internet han bajado, se ha alcanzado una masificación de dispositivos conectados y se han diversificado las aplicaciones digitales; la brecha de género en el acceso a las TIC se ha reducido.
Dispositivos de conectividad
En torno a la adopción de dispositivos de conectividad, encontramos que, al cierre de 2016, 79.2% de las mujeres usuarias de telefonía móvil poseen un Smartphone, tan sólo 4 puntos porcentuales menor a la registrada en hombres. Esto indica que la brecha de género en la adopción de estos equipos es mínima, tomando en cuenta que hace dos años la diferencia era de nueve puntos porcentuales.
En cuanto al acceso a tabletas, 21.6% de las mujeres cuenta con uno de estos equipos, sutilmente menor al 25.1% registrado en hombres. La tenencia homogénea de estos dispositivos de conectividad habilita las mismas posibilidades de acceso a herramientas de información, comunicación, educación, salud y entretenimiento para mujeres y hombres.
Perfil de la Mujer en las TIC
Fuente: The Competitive Intelligence Unit
Aplicaciones de conectividad
El incremento en el uso de equipos de conectividad conlleva a su vez, a un aumento en el uso de internet móvil. De tal manera que 49.2% de las mujeres mexicanas (y una razón similar de los hombres) cuentan con un acceso a Banda Ancha Móvil para mantener una conexión permanente a internet. La adopción de servicios de conectividad ha promovido a su vez que, de las mujeres que cuentan con acceso a internet y un dispositivo conectado, 92.5% utilicen aplicaciones de mensajería instantánea y 76.2% redes sociales.
Entre los principales usos de la BAM destacan: revisar redes sociales (74% de las mujeres con BAM), chatear (56%), realizar búsquedas (45%), revisar su e-mail (29%) y ver videos (17%).
Usos de BAM entre las Mujeres
(Proporción de Usuarias, %)
Fuente: The Competitive Intelligence Unit
En lo que toca al uso de aplicaciones móviles, la totalidad de las mujeres usuarias suelen descargar aplicaciones gratuitas. Entre aquellas con una mayor preferencia de descarga resaltan aquellas de mensajería instantánea (97%) y redes sociales (95%), seguidas por juegos y entretenimiento (45%), música y audio (37%), fotografía y video (23%) y productividad (14%).
La adopción de TIC registra un entorno de equidad de género, es decir que tanto mujeres como hombres tienen las mismas oportunidades para acceder a aplicaciones y beneficios de internet. De manera que se sienta un precedente para promover el cierre o eliminación de brechas desde otros ámbitos, por ejemplo, en el acceso a la educación y niveles de ingreso.
A partir de todo lo anterior, se puede inferir que la eliminación de barreras de género es un hecho muy positivo, puesto que habilita una oportunidad para transformar la calidad de vida de la mayoría de la población de nuestro país.