MÉXICO 3 DE NOVIEMBRE DE 2016 (CIU).- En la actualidad, el mercado de telecomunicaciones móviles se encuentra en una fase de regulación asimétrica que busca compensar desequilibrios del mercado que han resultado de una excesiva concentración de mercado.
Con ello, se busca gestar un entorno de creciente competencia, que acompañe a la reciente reducción de precios de los servicios móviles, que ha dado pauta a un aumento tanto de la penetración de servicios móviles, como del consumo de los mismos.
Al cierre del tercer trimestre del 2016 (3T16), contabilizan 110.4 millones líneas móviles, lo que representa un crecimiento anual de 5.2%. En perspectiva histórica, estos niveles de crecimiento no se observaban desde mediados del 2013, donde el mercado comenzaba a mostrar señales de agotamiento, tanto por excesivo nivel de concentración que mantenía el mercado ante un marco regulatorio ineficaz para hacer frente a ello, como por la falta de dinamismo en la actividad económica del país.
Hoy en día el segmento móvil cuenta con un nuevo operador, AT&T, que ha detonado mayores montos de inversión en infraestructura y estrategias comerciales disruptivas que conjuntamente resultan en un empoderamiento del consumidor en la elección de operador y paquetes de servicios.
Así, en el 3T16, se supera la barrera de 110 millones de líneas móviles, a más de tres años y medio de haber superado las cien mil.
Al analizar el grado de avance en la reconfiguración del mercado a favor de los competidores, aún se identifica una excesiva participación de mercado del operador preponderante (Telcel) que provee servicios móviles a 65.9% de las líneas del mercado. La ligera disminución de la participación de mercado de Telcel que se ha observado en los últimos periodos se debe principalmente a la atracción de usuarios y consecuente aumento en la huella de mercado de AT&T y Movistar, con tasas anuales de crecimiento en su base de líneas de 32.2% y 10.8%, respectivamente, mientras que aquella de Telcel se redujo 0.3% al comparar con el tercer trimestre de 2015.
Así, al 3T16, la cuota de mercado de Movistar asciende a 23.5%, AT&T 9.7% y el 0.89% restante, corresponde a los Operadores Móviles Virtuales (OMV).
En términos de adiciones netas, AT&T acumula el mayor monto al alcanzar 743 mil nuevas líneas, de las cuales 606 mil son de prepago y 137 mil de postpago. Por su parte, Movistar incorporó 8.7 mil líneas, al incrementar 11.9 mil usuarios su base de prepago y perder 3.2 mil en el caso de postpago. En lo que corresponde a Telcel, el operador preponderante registra variaciones netas negativas, al reducir en 536 mil sus líneas de prepago y abonar 168 mil líneas en postpago, que resulta en una reducción total de 368 mil clientes móviles.
En periodos recientes, se identifica que el operador preponderante está reduciendo trimestre a trimestre su base de prepago, mientras que ha aumentado aquella de postpago. A su vez, Movistar ha disminuido la atracción de usuarios a su red en ambas modalidades de pago. En cambio, AT&T, ha logrado incrementar significativamente, sus líneas tanto de prepago y como de postpago.
A partir de ello, es un hecho que la reducción de precios y la transición hacia ofertas competitivas ha llamado la atención de los consumidores, tal que ha detonado la generación de mercado, así como el consumo de servicios.
Queda pendiente una reconfiguración notable en el entorno competitivo que permita la generación de mayores ingresos para operadores entrantes, que se traduzca a su vez, en mayores incentivos a la inversión y al mejoramiento de las condiciones de los servicios móviles. Cabe esperar que la aplicación y cumplimiento efectivo de las medidas de regulación asimétrica aplicables al operador preponderante permitan ciertamente esa renivelación del mercado, para alcanzar el anhelado escenario de competencia, con sus consecuentes efectos positivos sobre el bienestar de los consumidores.