MEXICO DF 10 DE MARZO DE 2016 (CIU).- Al finalizar 2015, las principales métricas relativas al sector convergente de Telecomunicaciones y Radiodifusión identifican una aceleración en el crecimiento medido en suscripciones de los servicios y en algunos segmentos también en términos de los ingresos generados por los operadores, como en el caso del segmento móvil.
En términos generales, la rampa descendente en el nivel de precios de los servicios, la creciente competencia en inversión en infraestructura, las nuevas estrategias tarifarias de los operadores, así como la consolidación de operadores en el mercado y el entorno macroeconómico favorable, han dado lugar a una dinámica de crecimiento al alza en este sector convergente.
Durante los 12 meses del año pasado, los ingresos de los operadores de telecomunicaciones alcanzaron $436,573 millones de pesos. En su composición por segmentos 57.1% de los ingresos son atribuibles a las telecomunicaciones móviles, 27.9% a aquellas fijas y 15.0% a la TV de paga y servicios convergentes.
Este dinamismo es producto del esfuerzo de inversión y comercial de nuevos entrantes (AT&T), que han provocado reacciones semejantes de parte de Telefónica e incluso del preponderante, Telcel. Es decir, son efectos del mercado, que no deben ser confundidos con los aun esperados efectos de las medidas regulatorias aplicadas por la preponderancia.
En su configuración competitiva del segmento, en términos de líneas e ingresos, se identifica prácticamente el mismo nivel de concentración que a la entrada de las medidas asimétricas de preponderancia, hace dos años, en marzo de 2014. Concretamente, el operador preponderante (América Móvil) alcanza una participación de mercado medida en líneas de 68.4% en el cuarto trimestre de 2015, tan sólo 2.2 puntos porcentuales por debajo de su ponderación en el primer trimestre de 2014 equivalente a 70.6%.
En telecomunicaciones fijas, se perfila una situación similar. El operador preponderante continúa con una elevada participación de mercado de alrededor de 70% medida en líneas y 80% en ingresos. Al igual que en el segmento anterior, los avances en competencia son insignificantes a pesar de la regulación asimétrica aplicable al operador.
Por su parte, el sector de radiodifusión (radio y televisión abierta) medido por sus ingresos disminuyó 8.1% durante 2015, como resultado de la creciente competencia por la inminente entrada de la nueva cadena nacional licitada el año pasado, así como por aquella que resulta con otras plataformas de distribución de contenidos, como los servicios OTT y la TV de paga.
Dos Años de Preponderancia
A dos años de la entrada en vigor de la fórmula de la preponderancia, su aplicación revela insuficiencia para promover competencia efectiva. Es decir que, si bien la Reforma y su consecuente Ley son esfuerzos valiosos, estamos hoy en la fase también crucial de su aplicación efectiva.
Por ejemplo, a dos años del ordenamiento de la comparación de infraestructura, ni una sola antena opera sobre las torres del preponderante, por lo cual no es de sorprender que Telcel siga siendo el gran ganador en el juego de la portabilidad numérica por efectos de cobertura. De haberse aplicado dicha compartición, el juego de mercado contaría ya hoy con un escenario efectivamente balanceado.
Otro caso es el referido a la reciente licitación de la banda AWS que no consideró el tope espectral básico de las licitaciones pro competencia, con lo que resultó una marcada concentración del espectro radioeléctrico en favor del preponderante. Puesto en números, el preponderante pasó de poseer 30% del recurso escaso asignado a 41%.
De no asegurar la aplicación efectiva de las medidas de preponderancia, pasaremos décadas para la alcanzar la anhelada nivelación de mercado. Cada día que esto no suceda representaría mermas en el bienestar del consumidor.