*.- Los videos que documentan la incursión militar son decisivos
*.- El Beneficio de la libertad para dos de los capturados inicialmente
En el transcurso de las próximas horas deberá realizarse la reconstrucción de los hechos ocurridos durante la madrugada del sábado pasado, según autorizó la Juez Noveno de Distrito, Blanca Evelia Parra Meza, para desahogar las ocho pruebas que fueron presentadas por la defensa del empresario Jorge Hank Rhon y el resto de los detenidos.
La intención de realizar esa “reconstrucción” es para determinar cómo es que ocurrieron en realidad los hechos donde fueron capturados Jorge Hank Rhon y otras personas más, ya que existe discrepancia entre lo que dicen la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Procuraduría General de la República y los once detenidos.
Para el caso, se confió a AFN, será vital el conocimiento del contenido de los videos captados por las cámaras de seguridad del Grupo “Caliente”, ya que de esta forma se podrá determinar quiénes, dentro de este caso, están declarando de acuerdo a como se produjeron los sucesos.
Algunas dijeron no conocer si entre las ocho pruebas aportadas este día por la defensa, se encuentran esos videos, sin embargo otras más afirman que eso no ha ocurrido hasta el momento.
Por lo menos en una de esas multicitadas cintas, se alcanza a ver cuando unidades del Ejército Mexicano, repletas de hombres fuertemente armados, llegaron a la residencia de los Hank, a través de la calle Mocorito de la colonia Hipódromo e ingresaron a los terrenos de la propiedad, sin que nadie se los impida, tras someter al guardia de seguridad.
Se aprecia que elementos castrenses interrogan al agente que se encontraba en la caseta de seguridad, el cual saca un documento –que se presume es el permiso de portación de arma- y se los muestra, no obstante eso lo someten y lo llevan detenido con ellos, para luego dirigirse hacia la entrada de la casa.
Esto, contradice lo que se informó oficialmente, en el sentido de que soldados del Ejército Mexicano llegaron hasta ese sitio, alertados de la existencia de armas “en una casa de la colonia Hipódromo”, donde encontraron a otras tres personas armadas, que al verlos “corrieron hacia el interior” por lo cual fueron perseguidos y sorprendidos –se dijo entonces- con las armas y en flagrancia.
En la reconstrucción de hechos deben estar presentes todos los involucrados, por lo que se tiene conocimiento de que ya fueron notificadas las autoridades penitenciarias de “El Hongo”, para que se proceda a la excarcelación de los detenidos, a fin de que intervengan en esta reconstrucción.
Sobre el caso
Los dos hombres favorecidos este jueves, por la juez Noveno de Distrito con la libertad bajo fianza, son dos de los tres que el Ejército Mexicano dijo haber capturado a las afueras del Hotel Palacio Azteca y que junto con Juan Ignacio Parra Santos, habrían revelado que en la casa de Jorge Hank, existían armas de fuego.
Se trata de Carlos Gonzalo Pérez Contreras o Carlos Gonzalo Rizo Pérez, así como Ramón López Apodaca, quienes por el bajo calibre del arma que portaban, se les consignó a juez por “un delito no grave”.
Parra Santos negó frente al Procurador de los Derechos Humanos de Baja California, Heriberto García García, que se le hubiese detenido en el lugar arriba indicado y afirmó que se le aprehendió en las inmediaciones de la estación de policía “Margarito Saldaña”, cuando presumiblemente iba por un hermano, que es agente de esa corporación, a su trabajo.
Dijo que elementos del Ejército lo llevaron a las instalaciones militares y que trataron de obligarlo a que reconociera a los otros dos señalados “como homicidas”, cosa que él negó hacer rotundamente, afirmando que no los conocía. A Parra Santos, a diferencia de los otros dos, no se le consideró en la comisión de “un delito NO grave”.
Sobre los otros detenidos, a los que también se les consignó por posesión de arma de fuego –como delito grave- por el alto calibre que manejaban-, se encuentran:
De las 88 armas incautadas por el Ejército, el Secretario de Seguridad Pública dijo que 7 de éstas corresponden a la Secretaría y tienen su debida licencia, en tanto que los policías comerciales estaban autorizados para utilizarlas.
De igual forma comentó que las armas largas y cortas utilizadas por 82 policías comerciales contratados para ese lugar, eran almacenadas en un casillero especial de ese complejo empresarial, al terminar la jornada.
La Procuraduría General de la República hizo saber al respecto, que de 77 armas no se tenía permiso y que de éstas, 49 eran de las llamadas de alto poder.