TIJUANA, BC 24 de JULIO 2011 (AFN).-

*.- Engañados por una sexoservidora y un hombre en hotel que ofrecieron cruzarlos "al otro lado", sus captores los torturaban

Una persona, quien permaneció secuestrada, fue liberada de sus captores la noche del sábado en la delegación la Presa Rural; dos personas presuntamente involucradas fueron capturadas por la Policía Municipal de Tijuana.

Los hechos ocurrieron a las 23:00 horas del sábado, de acuerdo al reporte policiaco, en un domicilio de la colonia Terrazas del Valle ubicado en el lote 12 manzana 33 de la calle Hacienda El Tecolote, entre las calles Hacienda Santa Mónica y Torres Norte.

De acuerdo con el informe, uno de los secuestrados logró escapar de sus captores que lo tenían junto con otras personas en un cuarto de madera, y al salir dio aviso a la policía de que en la parte trasera de la casa, en un cuarto de madera se encontraban otras personas en las mismas circunstancias.

Una vez en el lugar los policías encontraron semi abierta la puerta principal del cuarto de madera, donde fueron asegurados los de nombre Esteban Estudillo Álvarez, de 21 años; y Luis Antonio Chávez Jaime, de 28.

A éste último se le encontró un arma de fuego tipo escuadra negra marca Star, de calibre 9 milímetros y número de serie 4788, con cachas de plástico café y escrito el nombre de "Bonifacio Echeverría Eibar", mismo que tenía cargador abastecido con 3 cartuchos útiles calibre 38 súper.

Engañados y torturados

Debajo del colchón de unas literas los agentes se percataron que había dos personas acostadas boca abajo, amarradas de pies y manos con cinta adhesiva roja.

Se trataba de dos migrantes quienes se identificaron como Mauricio Vivar Pérez y José Peña Nava, de 27 y 23 años, respectivamente, mismos que manifestaron que estaban privados de su libertad desde el jueves 21 de Julio.

Esa noche, señalaron, en la Zona Centro los había contactado una sexoservidora y una persona de sexo masculino sobre la calle Cuarta, entre las avenidas Revolución y Madero en el Hotel Adelita.

Les prometieron que los ayudarían a cruzar a los Estados Unidos, los llevaron en un taxi libre hasta el domicilio en mención, y allí los dejaron encargados la primera noche con una persona a la cual apodaban "El Cora" y otra de apodo "El Gera".

Sus vigilantes los estuvieron golpeando en repetidas ocasiones en diferentes partes del cuerpo y torturándolos psicológicamente para que realizaran una llamada telefonica a sus familiares que se encuentran residiendo en California, a quienes exigieron 4 mil dólares por su libertad, señala el informe municipal.

Peña Nava manifestó que sus familiares depositaron 2 mil 995 dólares la noche del viernes 22 de julio, cantidad que el jefe de la banda a quien apodaban "El Sinaloense" se encargaría de cobrar.

Este últmo regresó la noche del viernes y pagó una cantidad, la cual se desconoce, a los que cuidaban a los migrantes, quienes se retiraron y fueron relevados por otros dos, en este caso los que fueron detenidos, mismos que a su vez los amenazaban de muerte para exigir a los familiares otros 2 mil dólares.