MEXICALI BC 7 DE ENERO DE 2015 (AFN).- Los recién nacidos requieren de cuidados sencillos como alimentación, aseo y vigilancia, no obstante es vital tomar en cuenta las condiciones climáticas de esta temporada fría para evitar complicaciones, advirtió Alfredo Comparán Núñez, jefe de prestaciones médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Bañar al infante todos los días, poniendo especial cuidado en que sea en un lugar cerrado, sin corrientes de aire; el horario más cálido es después de las 12:00 horas.
Lo ideal es el agua tibia; hay y que recordar que la piel de un recién nacido es muy sensible al agua caliente en exceso, lo que puede provocar lesiones cutáneas.
La temperatura de la habitación debe ser agradable, los demás cuidados son básicos; utilizar jabón neutro y evitar champús, talcos y cremas perfumados durante las primeras dos semanas de vida.
En lo que refiere al muñón umbilical, debe curarse diariamente después del baño con alcohol o mertiolate blanco, secar perfectamente y dejarlo descubierto. No utilizar fajas, ya que es un órgano que se desprende tras siete o diez días del nacimiento.
Evitar prendas en exceso, pues se corre el riesgo de provocar rozaduras en la piel, además de deshidratación. Debe protegérsele del frío con ropa adecuada y cómoda.
Otro punto importante, remarcó, es la leche materna que por sus nutrientes y cantidad de anticuerpos es la ideal para prevenir y combatir enfermedades estacionales. “El amamantar es indispensable y prácticamente insustituible”.
Es fundamental mantener al recién nacido en un ambiente entre 24 y 26 grados centígrados, no besarlo en la cara ni estar en contacto con personas enfermas y mascotas, además de alimentarlo por lo menos cada tres horas -día y noche- para evitar una deshidratación.
La madre debe cuidar su dieta; tomar agua en abundancia, no consumir irritantes, harinas y grasas y por ningún motivo ingerir bebidas alcohólicas.