Ensenada BC 13 de marzo de 2015 (AFN).- La bulimia es una enfermedad que por lo general inicia en la adolescencia y en mujeres jóvenes, se caracteriza por episodios regulares de comer en exceso y sin control; el papel de la familia es fundamental al detectarse los primeros síntomas, informó Jonnathan Verdugo Lara, psicólogo de la Subdelegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ensenada.
Explicó que se trata de un trastorno alimentario y psicológico, con el que se adoptan conductas que llevan al individuo a alejarse de la alimentación saludable, comiendo en exceso durante períodos de tiempo muy cortos -también llamados “atracones”-, para luego eliminar los alimentos a través de vómitos, laxantes, ejercicio físico intenso y ayuno.
Derivado de esto destacó, la persona experimenta miedo o culpa durante los episodios de ingestión excesiva de alimento y purgas, pues sabe que su patrón de alimentación es anormal.
Y es que una de las causas, es la presión sociocultural que ocupa un lugar preponderante, que induce a las adolescentes a alcanzar un cuerpo delgado; y si además presentan problemas de autoestima, lo compensan con un control excesivo de la dieta, señaló el especialista del IMSS.
Mencionó también, que aún no se ha podido identificar los factores que permitan predecir el resultado del tratamiento; sin embargo, la gravedad de las secuelas pueden ser un indicador importante de un buen pronóstico; en casos graves quien lo sufre puede fallecer a consecuencia de un atracón o incluso, por suicidio.
La bulimia, detalló, puede causar problemas y complicaciones de salud a corto o largo plazo como arritmia cardíaca, ansiedad o compulsión por comer, obsesión por mantener un peso por debajo del normal, abuso en el consumo de medicamentos laxantes y diuréticos.
Otras consecuencias son, heridas de la mucosa bucal, piel seca, debilidad de las piernas, deficiencias nutricionales, irregularidades menstruales, baja densidad ósea, deshidratación, estreñimiento y estrés por calor.
Por todo lo anterior, Verdugo Lara, puntualizó que es importante que a los primeros síntomas se acuda al médico especialista quien determinará el tratamiento a seguir, que puede ser médico y/o sicológico; que en todos los casos, involucra un grupo multidisciplinario de especialistas para superar el problema.