El análisis de la resolución del Tribunal Superior de Justicia Electoral de Baja California, que en esa sesión compartió el magistrado Leobardo Loaiza, exhibió a sus compañeros magistrados Martin Ríos Garay y Elva Regina Jiménez Castillo, como autores de un acto premeditado para ignorar irregularidades que ameritaban la anulación de la elección de munícipes de Tijuana.