Aun cuando la tarea institucional de apoyo a la familia en Tijuana, se ha profesionalizado y ha evolucionado, así como el papel desempeñado por las esposas de los alcaldes que la ciudad ha tenido, la problemática social se ha disparado hasta alcanzar niveles preocupantes, y el problema esencial sigue siendo el mismo de siempre: la falta de recursos.
José Enrique García Sánchez