La captura de un oficial de alto rango en la policía municipal y un colaborador suyo en el momento de pretender cobrar el dinero producto de una extorsión, puso el dedo en la llaga de la corrupción que empaña la imagen de la corporación, en momentos en que pesa la denuncia que por tortura y otras irregularidades, fue presentada contra elementos de la misma, por parte de un hombre acusado inicialmente del homicidio de un agente policiaco.
José Enrique García Sánchez