*.- Y podría dejar de ser sacerdote
Las propiedades que obtuvo como Párroco del Templo del Santísimo Sacramento en Rosarito, el padre Raymundo Figueroa Pérez, podrían pasar en breve a disposición de la Arquidiócesis local, Rafael Romo Muñoz.
Entrevistado este miércoles, el jerarca de la Iglesia Católica dijo que lo anterior por “el modo de cómo consiguió el dinero” para financiarse, lo cual es parte de las causas que llevaron a decidir la remoción del “padre desobediente”, de la parroquia mencionada.
El Arzobispo explicó que hasta el momento Raymundo Figueroa sigue siendo un sacerdote de la Iglesia Católica, ya que a la fecha sólo está suspendido, sin embargo su situación podría variar en caso de continuar en el estado de rebeldía en que se encuentra.