*.- Quadri se descontrola por las preguntas sobre la maestra Gordillo
Nota: Gabriela Martínez Córdova
Fotos: Antonio Camarillo Téllez
TIJUANA BC 12 DE MAYO DE 2012 (ANF).- Atrás quedaron la “Quadri-Combi” y el Jetta blindado de color negro y de cuatro cilindros que normalmente utiliza en sus desplazamientos.
También quiso dejar atrás a la maestra Elba Esther Gordillo a la que pretendió “sacudirse” denodadamente, negándola en repetidas ocasiones durante su estancia en Tijuana, donde Gabriel Quadri de la Torre se dijo acosado; peleó con estudiantes y maestros y sugirió alguna “consigna” por un tratamiento difícil que aseveró que no tenía antes de su participación en el reciente debate presidencial.
Este viernes, el abanderado del Partido Nueva Alianza (PANAL), Gabriel Quadri de la Torre, llegó a la ciudad escoltado por agentes del Estado Mayor y militantes de su partido, al que dijo “no pertenece” y no apareció en la famosa Quadri-Combi en la que aseguró que recorrería todo el país.
La persecución para seguirle la pista al candidato, inició en punto de las 5:30 horas del día referido, ya que ante los rumores de su participación en una rueda de prensa a las ocho de la mañana, la reportera comenzó sus actividades “informativas” más temprano que lo habitual.
Se informó que el candidato tomó un baño, después el desayuno y luego arrancó el vehículo en que se transportaba para dirigirse a donde supuestamente sería el encuentro. Lo acompañaban tres o cuatro unidades con agentes de seguridad y otras cuatro con militantes del partido.
La combi, azul con blanco, que prometió que recorrería todo el país y lo acompañaría en cada uno de sus actos, posiblemente quedó “varada” en su último encuentro estudiantil realizado hace dos días en la Escuela de Periodismo “Carlos Septién”, porque en esta ocasión “no se vio”.
La última vez que el motor de ese carrito arrancó por una calle, le originó al candidato “ciudadano” una serie de críticas y señalamientos bastante severos en su contra por parte de los estudiantes, al punto de “reventarlo” y lograr su retirada, en medio de las acusaciones.
Lo anterior aconteció a raíz de que el aspirante presidencial llegó a esa escuela de periodismo, en el Distrito Federal, en un Jetta de último modelo, el cual cambió tan sólo unas cuadras del plantel, donde lo estacionó, para subirse y llegar en la afamada combi. Este hecho que quedó registrado en un video, que después fue difundido en las redes sociales.
Por lo tanto, el carro tipo “Scobby Doo” no tocó tierra tijuanense y en vez de eso, Quadri de la Torre se desplazó en una camioneta Suburban de color gris. Al bajar, risueño y madrugador, del automóvil, se dirigió con paso firme a la rueda de prensa. En el lugar, ya se le aguardaba con la pregunta “incómoda”.
“Buenos días…” dijo él, mientras tomó asiento en la silla de la mesita instalada en medio del salón. Comenzaron las preguntas. El escote de Orayén, salió a relucir entre los temas; también “los ataques de Josefina, candidata del Partido Acción Nacional (PAN), sin dejar de lado las propuestas en menor proporción y luego…
-A mí me gustaría saber su opinión con respecto a los líderes sindicales “vitalicios”, en evidente alusión a Elba Esther Gordillo, y, si en caso de llegar a la presidencia buscaría removerla de su cargo. Ésta fue la primera ocasión que se le cuestionó sobre “la maestra”.
Al instante de una serenidad reflejada en el rostro, Quadri frunció el bigote y respondió: “Eso hay que preguntárselo a los maestros que la eligen, yo no soy parte del sindicato y yo no tengo nada qué decir; no puedo interferir. Ningún gobernante puede, ni debe hacerlo”.
Y tras negar cualquier relación con la dirigente a la que “ni siquiera conozco”, siguió con otros temas. Minutos después otro reportero insistió con un ¿Cómo puede negar la relación con la líder sindical (u otros) si las evidencias indican todo lo contrario?
“Mira, es evidente y todo mundo sabe que el PANAL es dirigido en buena medida por maestros y a mí me honra mucho ir de la mano de maestros en mi candidatura” y cambió de tema. Luego de una hora de hablar más de la maestra, que de otros temas -ya que destaca el asunto en cada evento al que asiste- se despidió.
Cuando el candidato pensó que ya no escucharía el nombre de la “impronunciable” maestra, los medios presentes arremetieron de nueva cuenta con el tema. De entre éstos salió una voz: ¿No le preocupa a Quadri cargar siempre con la sombra de Elba Esther Gordillo? A lo que el abanderado del PANAL respondió: “Yo no tengo nada que ver con ella y quien piense eso está equivocado”.
En medio de su retirada, los reporteros le insistieron al unísono ¿Pero cómo? si ella fue la fundadora del partido? Y él, ya un tanto molesto y con desdén dijo “bueno, sí. Ella fue fundadora del partido, pero eso fue hace años; ahora ni siquiera es miembro”. Con esa respuesta, puso fin a la rueda de prensa.
Listo. Después de concluida la primera “Quadri-parada” inició la carrera para intentar llegar antes que él y su contingente a las instalaciones de la Universidad de Tijuana CUT. Pese a que el objetivo se logró, a su vez se desvaneció la posibilidad de ver a la combi. Nuevamente ésta no apareció.
El candidato que se define anti-político o ciudadano, arribó al plantel en medio de preparatorianos y universitarios que al momento le tomaban fotos y lo grababan con sus celulares. Al preguntarles si sabían quién era muchos de éstos contestaron: ¡No! creo que es algo de la política” decían.
Entró al recinto que estaba repleto de asistentes. Y ahí dio inicio a su ponencia. No sabía lo que le esperaba. Un silencio quedó registrado, sólo su voz se escuchó, pero luego al dar comienzo la sesión de preguntas y respuestas la situación dio un giro que no esperaba y el hombre de ciencia fue fuertemente cuestionado.
*.- Reclamos, regaños, ironías y el Rector… ¡calló a todos!
Primero, Quadri de la Torre repitió sus propuestas. Se dijo “ciudadano” una vez más y comenzó. Al inicio de la sesión preguntas y respuestas advirtió con sarcasmo y hartazgo: “Bueno empezamos con las preguntas, y, sí… ya sé que me van a preguntar de Elba Esther Gordillo, pero no importa estoy para contestarles todo”.
El primer “gancho” fue de un maestro integrante del cuerpo de catedráticos de la Universidad. Éste se auxilió con una lista de señalamientos que llevaba por escrito. Le cuestionó al candidato su credibilidad y el hecho de que negara ser político pese a ser candidato de un partido y participar en una contienda electoral. También recriminó el fraude de la famosa “Quadri-combi” que quedó evidenciada en días pasados.
Además le recordó que el PANAL, partido del que se ufanó el candidato de estar orgulloso, fue integrado a partir de un oscuro y bochornoso incidente en el que aseguró, fueron utilizadas las credenciales de los maestros para registrarlos en el partido sin tener permiso alguno. Y ya para rematar, el maestro lo llamó “mercenario del PANAL”.
Quadri con toda su inteligencia y un poco de risas, respondió: “Te felicito porque hiciste una lista minuciosa de mis ataques; hasta la traes escrita, pero ¡qué bien! porque es mejor una lista escrita que una memoria que falla”. Los ataques siguieron por parte del alumnado, incluso de algunos que lo cuestionaron un tanto nerviosos.
El candidato se reía. Luego de otras respuestas sentenció, “Estos ataques no se veían antes del debate y ¡Qué bueno que los hagan! porque eso significa que me tienen miedo”, afirmó. Sin embargo, cuando se pensó que las “aguas” se habían calmado, tomó el micrófono otra maestra y respaldó a su compañero que habló inicialmente.
“Es verdad lo que dijo el maestro. Cuando hicieron el partido, hasta no sacaron a la fuerza cuando intentamos detenerlos” y señaló a una de las presentes miembro del SNTE, ¿Verdad que sí? tú estabas allí cuando pasó, le evidenció. La mujer aludida, con “cara de horror” y con ganas de desaparecer pronto tuvo que “apechugar”.
Lo anterior porque al señor Quadri se le ocurrió decir ¡contéstele! ¡Vamos! tiene derecho a hacerlo. “Yo creo que quiere hablar”. La acusada vestida con atuendo blanco y azul, en armonía con los colores del partido Nueva Alianza, se levantó y dijo: “Compañera, yo creo que usted está confundida, eso fue cuando pasó lo de la huelga por el ISSSTE”.
Lo que sería un foro para compartir con los estudiantes y maestros, dio un giro hacia otro tema, para dar pie a una trifulca verbal y apasionada entre maestros y sindicalizados bajo el mando de Esther Gordillo. Quadri, sentado en la esquina de un escritorio, donde lo acompañaba el Rector de la Universidad sólo podía observar lo que allí sucedía. Una vez, como en el pasado debate de presidenciables, su intervención no fue requerida.
El Rector de la Casa de Estudios, el polémico y célebre profesor Jesús Ruiz Barraza (ligado al PRD) se levantó en medio de los “dimes y diretes” y reclamó: “¡Por favor! ¡Orden!, recuerden que no siempre tenemos la oportunidad de tener aquí a un candidato a la presidencia. Hay que hablar del futuro y sus propuestas”. Mientras varios guardaban la compostura solicitada, otro connato de pleito se desarrollaba:
Un camarógrafo de un canal local intentaba realizar sus “tomas”, pero un agente del Estado Mayor llegó y le advirtió: “Ya terminó sus tomas ¡muévase! sin el “por favor” que era mucho pedir. El compañero, solicitó permiso para seguir haciendo su trabajo, pero el escolta no lo permitió y le solicitó el nombre pero el camarógrafo no lo proporcionó. Aquel lo sujetó del brazo.
Minutos después, el camarógrafo se retiró. El agente lo mismo hizo con otros dos fotógrafos, aunque a dos reporteras que estaban en este sitio no les dijo nada. Mientras ocurría lo anterior a escasos metros de Quadri, éste solo atinaba a mirar de reojo lo que ocurría para seguir con su discurso.
Por fin terminó el foro. Se despidió, y luego fue alcanzado por otro estudiante más, quien lo cuestionó sobre temas que él también negó, ¿Entonces contradices la información?”, reclamó el alumno y Quadri contestó con un tono un poco más enérgico: “Sí, completamente”. El alumno insistió: “entonces aprobaste los permisos…” para ser interrumpido y regañado con un ¡espérate! ¡Espérate!…” luego calló a los presentes y siguió con su respuesta.
No todo fue tan malo, porque cuando el candidato salió del salón, decenas de estudiantes que evidentemente no hubo necesidad de “acarrear” buscaron tomarse la foto con él. “Estamos orgullosos de ti” se escuchó de una voz perdida entre el estudiantado que lo rodeaba.
*.- La desgracia. Acosadora y con consigna.
Luego de haber realizado junto con Quadri y su flotilla el itinerario completo que se preparó para su visita en Tijuana, AFN siguió junto con él hasta el sitio donde primero ofreció su conferencia de prensa, ya que ahí se estableció que tendría un encuentro con empresarios de esta frontera. La reunión inició en punto de las 11:15 horas. En tanto la reportera tomó un café y platicó con los colegas ¿Qué les pareció Quadri en el CUT? Hubo de todo.
Y también hubo necesidad de “matar el tiempo”, ya que a los reporteros no se les permitió ingresar al lugar de la reunión, sino hasta hora y media después, donde les “daría atención”.
Unos reporteros preguntaron sobre sus propuestas, otros sobre el registro del partido, que dijo “no le interesa”. Sin embargo no faltó quien de nueva cuenta le preguntara sobre “la maestra”. La volvió a negar como Pedro a Jesucristo.
Y cuando por tercera ocasión esta reportera mencionó a la infaltable Gordillo y le preguntó si estaba utilizando al partido que insistentemente negaba, para poder ser candidato presidencial, ya con la sonrisa desdibujada aseveró “si consideras una desgracia que el partido me haya dado la oportunidad… para mi es una oportunidad”.
“Yo no hubiera sido un candidato de la izquierda porque no soy de esa corriente; tampoco de la derecha, hubiera sido del Partido Revolucionario Institucional (PRI) (porque hay más coincidencias con éste), dijo. Acusó: toda la mañana me has perseguido con la misma pregunta, parece que tienes una misión… evidentemente la tienes”.
Después del regaño hubo un silencio incómodo de los empresarios y unas que otras risas del equipo del señor Quadri, quien todavía preguntó a la reportera que si lo seguiría al puerto ensenadense, siguiente punto de su agenda.
Claro que no tenía caso hacerlo. Seguiría negando todo y principalmente ¡a la maestra!