*.- Las finanzas públicas llegaron a un punto crítico
*.- Ya no podrá el gobierno usar recursos para mantener control político
TIJUANA BC 11 DE OCTUBRE DE 2016 (AFN).- “Esto ya tronó” y el gobierno, indistintamente de su color partidista, ya no podrá seguir utilizando los recursos públicos para efectos de control político porque esos recursos son cada vez más escasos, y porque las reformas que se están adoptando en el país ya no lo permitirán, afirmó el ex gobernador y actual senador Ernesto Ruffo Appel.
Esto será todavía más evidente para la elección 2018, y aplicará para quien llegue al poder, incluido su propio partido, Acción Nacional, señaló el legislador en entrevista con AFN POLITICO Y ALGO MAS, en la que destacó que el nuevo escenario comenzará a patentizarse en la definición del paquete presupuestal para el próximo año.
En opinión de Ruffo el panorama es muy simple, los gobiernos, mayoritariamente priistas, se acostumbraron a disponer del recurso público para controlar la vida nacional y el escenario político, pero la disponibilidad de dinero se ha reducido cada vez más, en la medida en que fuentes de ingreso tan importantes como el petrolero se redujeron.
“La realidad se impone. Todos sabemos administrar los poquitos recursos que tenemos para el bien de nuestra familia, el gobierno que era el mandamás absoluto y todo mundo nos inclinábamos y lo obedecíamos era porque traía una bolsa de dinero y el control de esa bolsa, ahora resulta que esa bolsa no es suficiente para mantener a los incondicionales de ese gobierno”. Una consecuencia de esa realidad, es la caída continua en la votación a favor del PRI.
“El PRI hábilmente ha provocado las divisiones políticas, muchos partidos políticos, alianzas de control y reparto de recursos entre otros partidos políticos y el reinante, en fin, modelos de control pero todos ellos en retirada, son estrategias de alguien que está administrando lo poco que queda con una habilidad muy grande, no hay que dejar de reconocerlo por esa capacidad de controlar la hacienda sobre todo con fines políticos”.
El hecho es que ese modelo sustentado en la capacidad del gobierno de controlar el recurso público para su uso político, ya no está funcionando más, y esta realidad no tiene reversa.
“Por ejemplo, hoy acabo de ver el letrero de las casas de cambio y está a 18 mil 350 pesos por un dólar, que le hayan quitado los tres ceros habla de la quiebra de los sistemas financieros mexicanos, abusados por el gobierno cuando controlaba el Banco de México, pero desde que lo dejó de controlar, esa manera de malversar los fondos y los ahorros de los mexicanos ya no la tuvo y eso lo acotó”.
Otro ejemplo, añadió, es el “el manoseo sin fondo y sin control de Pemex” que actualmente no es posible desde que se cayó el precio, y ese precio ya no sirve para financiar a un aparato de gobierno tan pesado, que ahora deberá ajustarse y achicarse aunque no le agrade.
La repercusión política de ello se ha venido manifestando con escasa participación electoral, y la prueba es el bajísimo porcentaje con que el presidente Peña Nieto ganó la Presidencia de la Republica, y con sin la legitimidad suficiente. Un fenómeno que –reconoció Ruffo- se acaba de repetir en el caso de Baja California y Tijuana, donde el porcentaje con el que llegara a la alcaldía el ganador de la elección, es igualmente bajísimo.
“Hay un resultado pero no hay legitimidad, entonces la gente ya no cree en estos gobiernos porque no han interpretado con compromiso patriótico y de mexicanos la necesidad, el interés público de los mexicanos. Lo que han interpretado es como me mantengo en el poder”.
Ernesto Ruffo recordó la época en que compitió para alcalde y posteriormente para gobernador del Estado hace casi 30 años, y “suponía que se iba a arreglar todo. Pues no se arregló todo, al contrario, se desarmaron cosas que antes eran absolutamente controladas por el gobierno”, pero aunque los cambios han sido graduales, finalmente se están produciendo para obligar a quien este en el gobierno, a adoptar un modelo distinto e inevitable.
“Cuando digo ya tronó, el que tronó es el gobierno y sus maneras de hacer las cosas”.