Una de las batalla más importantes en el mundo comienza a ser ganada, al menos eso indican nuevos datos recientes de las Naciones Unidas: las tasas de mortalidad de menores de cinco años han descendido en 49% en el periodo 1990-2013.
La media del ritmo de descenso anual se ha acelerado e incluso triplicado en algunos países, pero este progreso está lejos de alcanzar la meta mundial de la reducción de la mortalidad infantil en dos terceras partes para 2015.
Las estimaciones incluidas en el informe de 2014 “Niveles y tendencias en la mortalidad infantil” revelan que en 2013 murieron 6.3 millones de niños y niñas menores de cinco años, en su mayor parte por causas prevenibles, cifra que representa un descenso de 200,000 muertes respecto a 2012, pero que, aun así, se sigue traduciendo en 17,000 muertes infantiles cada día.
“Se ha registrado un progreso espectacular y cada vez más rápido en la reducción de la mortalidad en la infancia, y los datos revelan que el éxito es posible incluso en los países que cuentan con pocos recursos”, dice Mickey Chopra, jefe de los programas de salud mundial de UNICEF.
“Países de todo el mundo están mostrando un creciente interés por garantizar la aplicación de intervenciones probadas, eficaces y rentables con las que poder salvar el mayor número de vidas posible.”
En 2013 murieron durante su primer mes de vida 2.8 millones de bebés, un número que representa cerca de 44% de todas las muertes de menores de cinco años. En torno a dos terceras partes de estas muertes acaecieron en sólo 10 países.
Si bien el número de muertes neonatales ha disminuido, el progreso ha sido más lento que el logrado en relación a la tasa general de mortalidad de menores de cinco años.
En junio de 2014, la OMS, UNICEF y aliados publicaron el primer plan mundial para prevenir las muertes de recién nacidos y los mortinatos para 2035. El “Plan de acción para todos los recién nacidos” es un llamado a todos los países para que adopten medidas orientadas a prestar servicios de salud básicos y rentables –en especial durante el periodo perinatal, así como para los bebés enfermos o los más pequeños– y a mejorar la calidad de la atención.
Kaleydoscopio (www.kaleydoscopio.mx)