Por: Eduardo Suárez
México DF 5 de octubre de 2014 (kaleydoscopio.mx).- Los salarios mínimos están en la mesa de debates en México y el poder adquisitivo de los mexicanos que lo ganan está por debajo de muchos países hispanoamericanos, y desde el año 2000 las remuneraciones mínimas se encuentran estancadas. Su crecimiento de 2.3% este año significó un aumento de 2.52 pesos por día, que devora la inflación, incluso por adelantado.
Según datos de la Comisión de Nacional de los Salarios Mínimos, el sueldo mínimo de los mexicanos se divide en el área geográfica “A” y “B”: 67.29 pesos (2,018 pesos mensuales o 161 dólares) y 63.77 pesos.
En el área “A” están Distrito Federal, Baja California y Baja California Sur, algunos municipios de Chihuahua, Tamaulipas, Jalisco, Estado de México, Sonora, Guerrero, Nuevo León y Veracruz. Y en la “B” Aguascalientes, Campeche, Nayarit, Chiapas, Durango, entre otros.
El asambleísta Vidal Llerenas Morales asegura que desde marzo de 2014 se impulsó la discusión sobre salario mínimo como parte de la agenda respecto a los derechos económicos de los habitantes de la Ciudad de México, pues desde 2000 el salario se encuentra estancado con un crecimiento anual de 2.3%.
Información de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) revela que México tiene un salario mínimo poco competitivo en comparación con países como Chile (390 dólares), Argentina (435 dólares), Brasil (360 dólares), Uruguay (411 dólares) o Colombia (326 dólares aproximadamente).
El legislador planteó la posibilidad de que en México haya mejores salarios, al señalar que esto generaría un mercado interno mucho más sólido, así como la reactivación de la economía.
"Creemos que la discusión dentro de la Constitución de la ciudad puede ser un buen inicio, se debe iniciar un diálogo con las empresas para que establezcan un salario mínimo suficiente para vivir dignamente y posteriormente buscar medidas de ingreso mínimo por medio de políticas sociales para erradicar los actuales salarios.”
La aprobación de la reforma política será uno de los temas que podrá llevarse a la mesa de discusión y plasmarse en la Constitución, basada en derechos, luego de que la Corte ya ha establecido que el salario mínimo es un derecho de todos los trabajadores y cuyo monto debe ir acorde con una calidad de vida digna.
"Si el crecimiento del salario mínimo hubiera sido similar al que había en la década de los 80, actualmente sería de entre 6,000 y 7,000 pesos mensuales, pero al dejar de establecerse la política de crecimiento, al considerar que así podía detenerse la inflación, los más afectados han sido los trabajadores."
Llerenas Morales aseguró que es necesario eliminar la idea de que el incremento al salario mínimo contribuye a una mayor inflación, pues, indicó, de acuerdo con el Banco de México el actual crecimiento de la inflación se encuentra en el precio de los alimentos, o bien, en el costo de servicios ofrecidos por empresas monopólicas y no por los salarios, por lo que su crecimiento no generaría ninguna afectación económica, por el contrario, incrementaría la productividad, la vinculación del trabajador con la empresa y la reactivación de la economía.
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