Texto: Joel F. Gálvez Vivar

Fotos: Karol Joseph Gálvez López

Heroica Ciudad de Huajuapan de León, Oaxaca.- 22 de julio 2016.- Bajo un cielo nublado, amenazando una leve llovizna, fue desarrollada el acto cívico conmemorativo a los 204 años de la gesta heroica del indomable ‘Indio de Nuyoó’, la mañana de este viernes 22 frente a la estatua erigida explícitamente en honor al valiente indígena nativo de Santiago Nuyoó, municipio mixteco enclavado en las montañas del distrito de Tlaxiaco, en la región mixteca de Oaxaca.

El noble indígena, nativo del municipio mixteco de Santiago Nuyoó, distrito de Tlaxiaco, Oaxaca, cuya identidad nunca fue plenamente identificada, ni sus rasgos faciales se dieron a conocer a ciencia cierta, más sin embargo, el héroe epónimo de la gran Ñudee, se le adjudica en la persona de quien fuese José Remigio Sarabia Rojas, según testimonio de los nativos de aquella municipalidad, del que en la actualidad se encuentra hermanado con la Heroica Cabecera Municipal de Huajuapan de León, precisamente por la valerosa gesta que realizase el valiente e indomable indígena de Nuyoó (cara de luna en idioma mixteco).

La estatua levantada en honor al ‘Indio de Nuyoó’ sobre las calles que lleva este nombre, a cien metros aproximados frente a la parroquia de El Calvario, por ser el paraje de donde el indígena burló el cerco militar que había instaurado desde el 6 de abril de 1812, el sanguinario José Régules Villasante, jefe del ejército realista, que tomó por asalto a la entonces Huaxuapa, sitiando a un puñado de nativos que resistieron la embestida gracias a las estrategias y valor emprendidas en defensa por el coronel insurgente Valerio Trujano.

Pero fue el 14 de julio de 1812, cuando Valerio Trujano encomendó una de las misiones más peligrosas y valía relevante al indio de Nuyoó, un paisano que se enroló a la bola, para ir a Cuautla en demanda de auxilio al generalísimo don José María Morelos y Pavón, y es precisamente el paraje hoy conocido como El Calvario por donde salió el indígena con la encomienda, burlándose el cerco realista, para ello se cubrió con la piel de cerdo, según afirman historiadores que han escrito sobre la historia de la gran Ñudee (Huajuapan).

Al cumplirse 204 años en que ocurriesen ese hechos histórico, hazañas emprendidas con sagacidad por el noble indígena, por tal motivo el ayuntamiento huajuapense le tributó un homenaje en la que participaron la escolta de la policía municipal, personal de las corporaciones de socorro de la bomberos y protección civil, Comisión Nacional de Emergencia, el grupo de Pentatlón; así como personal de algunas áreas de Trabajadores de confianza del Municipio de la ciudad, entre otros y un reducidísimo de vecinos de El Calvario.

En tanto que el discurso oficial estuvo a cargo del regidor de movimiento territorial municipal, Raúl Sánchez Peña, quien destacó que: ‘Valerio Trujano, héroe de la guerra de independencia después de varios enfrentamientos con el ejército realista y después de varios triunfos en la mixteca llega a Huajuapan, donde por falta de parque y alimento, cae sitiado por el general Regules (Villasante), quien lo acorrala con unos dos mil 600 hombres. 15 asaltos se rechazaron, las municiones comenzaban a escasear, transcurrían los primeros días de julio sin que llegara ninguna fuerza protectora, Huajuapan se encontraba sitiado por los realistas, al mando de jefes y compañías de Villasante, Caldelas, Esperón y Vega. Fue entonces cuando Valerio Trujano con su serenidad acostumbrada ordena llamar al indio de Nuyoó, incluido ya entre la gente que luchaba por romper el yugo de los españoles, haciendo honor a nuestra raza indígena, es así como Trujano, confiando en su valentía, le encomienda llevar una carta al excelentísimo 
José María Morelos y Pavón, relatando lo sucedido y pidiendo ayuda para romper el sitio de Huajuapan’.

‘Haciendo uso de su inteligencia, Sarabia Rojas se disfrazó y logró precisamente en este lugar en que se encuentra erigida su estatua, burlar las filas enemigas de los sitiadores de Huajuapan, y montañas adentro se enfiló a Chilapa en busca de Morelos para entregarle la carta de solicitud de ayuda. Al mismo tiempo en Huajuapan se llevaba a cabo un novenario al Cristo negro en su advocación del Señor de los Corazones, rogándole y pidiendo su clemencia. Diligente y astuto, ágil e incansable, el indio de Nuyoó llegó hasta Chilapa insistiendo hablar con el generalísimo para entregarle noticias de Huajuapan. Así fue como el día en que la novena terminaba, el indio de Nuyoó que sirvió de mensajero, burlando a los sitiadores, se introdujo a la villa y dio la nueva de que Morelos se acercaba con su ejército; aquello pareció un milagro, y para demostrar su júbilo, iluminaron los edificios y aún los árboles con millares de candilejos de cebos de los almacenes, repicaron e hicieron salva’, aseguro Sánchez Peña.

‘Así fue como el 23 de julio de 1812, después de 111 días de permanecer acorralado Valerio Trujano, gracias a la astucia y valentía de José Remigio Sarabia Rojas, Morelos arriba a la ciudad de Huajuapan de León, rompe el sitio y libra a la ciudad mixteca del ejército español’, puntualizó el orador.

Finalmente dijo que ‘tales acontecimientos nos dan ejemplo y nos motivan a reflexionar, para anteponer los intereses generales a los particulares, convencidos de la construcción de un mejor Huajuapan dentro del orden y la prosperidad más que de las actitudes negativas. Es tiempo de seguir luchando, si nuestros héroes no dejaron que los mixtecos se doblegaran, tampoco lo debemos permitir nosotros’, concluyó el concejal de extracción panista.

Cabe señalar que durante que en el acto cívico conmemorativo, fue detonado el denominado cañón 'el niño’ que fue fundido de las campanas de hoy iglesia catedral de Huajuapan de León, mismo que aun se conserva intacto, y que está resguardado en las instalaciones del Museo Regional de Huajuapan (Mureh), con una salva como algo simbólico conmemorativo a los 204 años de la noble gesta del heroísmo del indígena mixteco de Santiago Nuyoó, distrito de Tlaxiaco, Oaxaca.