INGLATERRA 1 DE ABRIL DE 2018 (La Silla Rota).- La iglesia de la Gran Santa María, en Londres, fue el escenario para darle el último adiós a Stephen Hawking.
Seguidores, familiares y amigos estuvieron presentes a lo largo del recorrido que tomó el cortejo fúnebre, desde la casa de Hawking, hasta la iglesia.
El féretro de roble con los restos de Hawking fue cubierto con un ramo de lirios blancos, como símbolo del universo, y rosas blancas, representando la estrella polar, la más visible en el polo norte.
Las flores fueron colocadas por los tres hijos del científico: Lucy, Robert y Tim Hawking.
Al llegar el cortejo fúnebre, las campanas del templo repicaron 76 veces, una por cada año de la vida de Hawking.
El prestigioso matemático y cosmólogo padecía desde muy joven esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad que lo dejó en silla de ruedas y le obligó a comunicarse desde los años ochenta a través de un sintetizador de voz.
Durante el funeral, el actor Eddie Redmayne leyó un pasaje del libro del Eclesiastés, del Antiguo Testamento, y también hizo lo mismo el astrónomo Martin Rees, mientras que el hijo mayor de Hawking, Robert, y el profesor Fay Dowker, antiguo alumno del científico, fueron los encargados de pronunciar los halagos al cosmólogo.
Cabe mencionar que Redmayne interpretó a Stephen Hawking en el filme La teoría del todo.
El funeral fue oficiado por el reverendo Cally Hammond, deán de Gonville & Caius, del que Hawking fue miembro durante 52 años y donde dedicó tiempo al estudio de los agujeros negros.
Tras el funeral, los invitados acudieron a una recepción privada que tuvo lugar en el Trinity College de Cambridge, uno de los colegios más reputados de esta institución académica
El libro de condolencias, abierto el día de su muerte, permaneció hoy en Gonville & Caius, para que el público pueda firmarlo.
Las cenizas de Hawking serán colocadas junto a la tumba de Isaac Newton en la Abadía de Westminster, en Londres, durante un servicio religioso que tendrá lugar el próximo 15 de junio.
Las cenizas de Hawking estarán también cerca del lugar donde está enterrado el naturalista británico Charles Darwin.
El prestigioso científico, que rechazó el título de caballero que le ofreció en su día la reina Isabel II, contribuyó a establecer las bases de la cosmología moderna y se convirtió en un icono de la cultura popular y tan adorado como una estrella de rock.
La voz robótica del sintetizador con el que Hawking se vio obligado a comunicarse a partir de 1985 y su figura inmóvil en una silla de ruedas aparecieron en multitud de programas y series de televisión, como "The Simpson", "Star Trek" y "The Big Bang Theory".
Su salto a la fama lo había propiciado el libro "A Brief History of Time", en el que en 1988 explicó en un lenguaje accesible los últimos descubrimientos sobre la naturaleza de los agujeros negros y el origen del Universo, campos de los que él mismo había sentado las bases matemáticas.