El envío de remesas y el pago de impuestos de los migrantes hispanos en Estados Unidos representan beneficios por más de 11,000 millones de dólares anuales para la economía de ese país.
El aporte supera el equivalente a 1% del PIB, aseguró María Luisa González Marín, del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEC) de la UNAM.
Pero a pesar de las reformas estadounidenses de 1976, los trabajadores indocumentados sólo tienen derecho a educación y servicios médicos de urgencia.
En contraste, 75% contribuye a la seguridad social y al programa conocido como Medicare. Esto contradice los argumentos de los grupos que tratan de criminalizar la inmigración, subrayó en el marco de las actividades del IX Seminario-Taller de Economía Industrial Evaluación de la Industria Mexicana, a 20 Años del TLCAN.
Aportaciones relevantes
En 2012, la economía mexicana recibió 22,446 millones de dólares, divisas no encadenadas al crédito o la exportación, equivalentes a 1.9% del PIB mexicano y 48% de las ventas al exterior de petróleo crudo.
México es el principal receptor de estos recursos en América Latina, apuntó.
En las transacciones, las finanzas estadounidenses reciben beneficios: en 2011 los trabajadores gastaron 86 de cada 100 dólares de sus salarios en la Unión Americana.
González Marín señaló que en 2010 los indocumentados destinaron 11,229 millones de dólares al pago de obligaciones fiscales en EU.
En California y Texas, las contribuciones representaron 1.57% del total de recursos recabados. En comparación, la compañía General Electric —con ganancias de miles de millones de dólares— no aportó a este rubro ni un centavo y recibió créditos fiscales.
Irma Portos Pérez, investigadora del mismo instituto, explicó que las industrias culturales en México aportan entre 6.7 y 7.3% del PIB. Es necesario diseñar marcos regulatorios adecuados para impulsar a este sector.
Kaleydoscopio (www.kaleydoscopio.mx)