TIJUANA BC 4 DE FEBRERO DE 2013 (AFN).- El día de hoy, el ex senador de Massachusetts y ex candidato presidencial por el partido demócrata en 2004, John F. Kerry, asumió la dirección del Departamento de Estado, inaugurando una “nueva era” en la diplomacia estadounidense, al ser el primer Secretario de Estado hombre desde Colin Powell: entre 2004 y 2008, el Departamento estuvo liderado por Condoleezza Rice y durante la primera administración de Obama por Hillary Clinton.
En el mismo puesto donde la ex primera dama se despidió el viernes pasado, John Kerry saludó a los miembros de su nuevo equipo y comenzó su jornada como encargado de las relaciones exteriores norteamericanas. Su primera declaración versó sobre el atentado en septiembre del año pasado en Bengasi, Libia, donde extremistas islámicos aterrorizaron la sede diplomática de Estados Unidos y cobraron cuatro vidas, entre ellas la del embajador adscrito a ese país africano.
John Kerry, quien ha tenido en la mira el puesto de Secretario de Estado desde hace un tiempo, afirmó que este cargo público es un lugar desde donde se pueden realizar las mejores labores de un gobierno, incluyendo entre otras, la de lograr la paz. Durante el fin de semana, el nuevo líder de la diplomacia estadounidense se dedicó a entrar en contacto con diversos líderes del mundo, incluyendo el primer ministro israelí, el presidente de la Autoridad Palestina, y los cancilleres de Canadá, México, Turquía, Japón y Corea del Sur.
John Kerry, de 69 años de edad, es hijo de un diplomático estadounidense y fue miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado durante 28 años; la preside desde 2009. Durante su niñez, su padre estaba adscrito a la sede diplomática de un Berlín dividido en cuatro sectores por la Segunda Guerra Mundial: tres bajo el control de los aliados (Estados Unidos, Reino Unido y Francia) y uno bajo control soviético. Afirmó que esa experiencia a fines de la década de los 50s lo marcó profundamente y desde entonces está convencido de que en la batalla por la libertad y el valor de los principios e ideales democráticos, él está del lado correcto.
Con información de TheLos Angeles Times y The New York Times.