TIJUANA BC 11 DE DICIEMBRE DE 2012 (AFN).- Ante la inminente renuncia del Primer Ministro Mario Monti y las intenciones del difamado ex Premier Silvio Berlusconide competir nuevamente en el proceso electoral, Italia se encuentra en el umbral de un periodo de inestabilidad política y financiera, tras uno meses de calma relativa.

En principio, los comicios para elegir el nuevo Primer Ministro italiano tendrían lugar en abril del próximo año, pero todo parece indicar que la fecha se adelantará a febrero, reduciendo el margen de acción del actual gobierno para implementar las medidas destinadas a revivir la moribunda economía italiana y reducir su enorme deuda pública.

Los planes de Silvio Berlusconi por ocupar nuevamente la jefatura de gobierno de su país, un cargo que ha ostentado en los últimos 20 años en tres ocasiones, y de donde fue destituido y expulsado en el primero y tercer periodo –su último intento por gobernar Italia terminó abruptamente en medio de un escándalo en 2011–, aunado a la salida y retiro de su partido político de la coalición de centro-derecha durante un importante voto en el Senado la semana pasada, han acorralado al Primer Ministro Mario Monti a un abismo político. El aún dirigente italiano ha declarado que el fin del apoyo de las fuerzas leales a Berlusconi de su gobierno tecnocrático ha hecho que su permanencia en el poder sea imposible, y por lo tanto presentaría su renuncia una vez que el poder legislativo apruebe el presupuesto de 2013, a finales de este mes.

Desde que Monti asumió el poder en 2011 y organizó un gabinete apartidista, el gobierno ha concentrado sus esfuerzos en salir de la crisis económica que domina en la zona del euro, compartida principalmente por países como Grecia, España, Portugal e Irlanda. Esto se ha traducido en la implementación de medidas de austeridad, reformas laborales y nuevas tasas impositivas para asegurar la inversión extranjera directa y la determinación de Italia de ordenar sus finanzas y salir de la recesión.

Los críticos de Berlusconi afirman que sus posibilidades de éxito son mínimas, y que el triunfo de la coalición de centro-izquierda es más probable. A pesar de que el ex Premier ha dijo que su motor principal por participar en los comicios se debe a un “sentido de responsabilidad” por su país, sus detractores están seguros que la motivación ulterior está relacionada con la obtención del fuero, una hipótesis robusta en medio de las acusaciones de corrupción y los escándalos sexuales que rodean la figura del empresario italiano.

Con información de The Los Angeles Times.