MEXICALI BC 19 DE ABRIL DE 2023 (AFN).- La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda negó cualquier relación, de ella o de su esposo Carlos Torres, con los propietarios de los bares El Copeo o el Shots, en Mexicali.
Asimismo, calificó como “ruin y despreciable” la utilización del dolor de las familias de los jóvenes desaparecidos en la zona de bares de la capital del Estado, en la que dijo han caído algunos actores políticos.
“Es ruin y despreciable aprovecharse del dolor, de la pena, del sufrimiento de otras personas para hacer politiquería, eso sólo habla de que son ambiciosos vulgares, farsantes que se están aprovechando del dolor de estas familias para golpear políticamente”, dijo.
Lo anterior en referencia a los posicionamientos, ayer, en el Senado de la República, de las senadoras Gina Cruz y Alejandra León Gastélum, del Partido Acción Nacional (PAN) y de Movimiento Ciudadano (MC), respectivamente, en el sentido de que ha habido indiferencia y falta de acción del gobierno de Baja California para implementar acciones contundentes en materia de seguridad.
Asimismo, desmintió que tanto ella como su esposo Carlos Torres sean propietarios o socios de alguno de estos establecimientos, y refirió que conoce a los dueños de todos los bares y antros de Mexicali, toda vez que a su paso por la alcaldía de la ciudad entabló relación con ellos.
De igual forma, reconoció que en fechas recientes acudió a bailar a El Copeo, donde dijo, funge como socio una persona que, a su vez, es socio de ella y su esposo en otro negocio establecido en Tijuana, el cual dijo, incluso se encuentra en su declaración patrimonial.
Por otra parte, al ser cuestionada sobre sus actividades el fin de semana, cuando se desarrollaron dos manifestaciones en la zona de bares por parte de familiares de desaparecidos, Ávila Olmeda dijo, escuetamente, que estuvo trabajando, sin embargo, ante la insistencia de que ofreciera más detalle en ese sentido, pasó la palabra al fiscal estatal para que hablara sobre los cárteles de la delincuencia organizada que operan en la ciudad, para después dar por terminada la conferencia de prensa.
