CIUDAD DE MÉXICO 7 DE JUNIO DE 2016 (Agencia).- James Wan, el cineasta que puede presumir de ser maestro del horror, regresa a la pantalla con la aterradora cinta El Conjuro 2: El Caso Enfield, que desafiará el temple de cualquier espectador.
"Realmente creo que hay una separación entre el horror que existe en películas de corte sobrenatural y fantástico y lo que sucede en el mundo real, pues el terror es creado por dos fuerzas completamente distintas. Lo que sí es que no sabes qué es más aterrador: un fantasma o los seres humanos”, comenta el director.
Caso verídico
La secuela, que se estrena hoy en salas del país, se ubica en Inglaterra, donde una madre soltera y sus cuatro hijos se ven atormentados por el espíritu de un hombre viejo quien falleció en su sofá y se niega abandonar su humilde morada.
Los cuatro pequeños Hodgson son los más afectados con la manifestación del espantoso, en especial la pequeña Janet (Madison Wolfe), quien se vuelve en la posesión idónea para el senil alma en pena.
El Vaticano interviene a través de Ed (Patrick Wilson) y Lorraine Warren (Vera Farmiga), la pareja de investigadores paranormales encargados de descubrir que la presencia del anciano fantasma es el menor de sus problemas, en realidad el poderoso demonio Valak es la mente siniestra detrás de los inquietantes sucesos