ENCENADA BC 31 DE MARZO DE 2016 (Agencia).- El mediodía del viernes 31 de marzo de 1995, Selena Quintanilla Pérez, luego de una discusión con la presidenta de su club de fans, recibió un disparo que le quitó la vida.
La llamada reina del Tex-Mex, la ganadora de 36 premios del Tejano Music Awards, moría en Corpus Christi a los 23 años, a manos de Yolanda Saldívar.
Hace 21 años su voz se apagó, pero su figura se volvió un mito, una imagen y una obra que siguió ganando premios como mejor artista de 1996, incluso uno tan reciente como la vocalista femenina del 2011, ambos otorgados por los Billboards Latin Music Awards.
"Nadie había hecho lo que ella hizo con la música tejana que fue el de innovar el género y hacerlo del gusto de todos”, afirma Miguel Ángel Arritola, periodista de espectáculos por 25 años y uno de los más profundos conocedores del mundo de las estrellas en México.
Estrella inigualable
Arritola recuerda el éxito de la cantante texana y su particular atuendo: "el manejo de su imagen. Todo mundo recuerda su forma de vestir. Su figura sensual..su peculiar manera de atender a sus fans. Ella marcó un lazo muy importante con sus admiradores. Era muy terrenal pero a la vez inalcanzable, manejaba mucho, y sin querer, ese aire de ‘diva’ que hoy nadie tiene...”.
Para el periodista, la estrella de Corpus Christi aún no se apaga, sencillamente porque hasta la fecha no surgido otra cantante con su carisma y su talento: "Sigue siendo una super estrella porque aun ahora no hay quién ocupe su lugar. De hecho, con ella murió el género Tex Mex.”
Aquel disparo de Saldívar en la habitación 158 del hotel Day Inn de Corpus Christi terminó no sólo con la vida de una joven cantante, sino con la más grande exponente del género Tex-Mex y quizá con la primera y última reina de la por ella bautizada tecnocumbia.