LA BUFADORA
Por. – El Mosquito
ENSENADA BC 25 NOVIEMBRE 2024.- Tan no estaba en sus planes renunciar como director de Seguridad Pública Municipal de Ensenada (DSPM), que Martín Álvaro Alva Urías había confirmado su presencia este lunes a la sesión semanal del Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada (CCEE) que preside Marco Antonio Estudillo Bernal, pero el fin de semana sucedió algo que lo obligó a retirarse “por motivos personales”, cuando todavía no cumplía ni dos meses en el cargo, y su salida obviamente genera toda clase de lecturas, entre ellas que no gozaba de la “bendición” de las altas esferas del poder.
Y quién entra al quite, porque se da por descontado que la mayoría morenista y sus aliados en el Cabildo ensenadense aprobarán su nombramiento, es el veterano policía oriundo de Mexicali, Alejandro Monreal Noriega, del que se dicen muy buenas cosas, pero lo mismo referían de Alva Urías.
Este súbito y prematuro cambio en el principal mando policiaco del municipio es preocupante dados los últimos acontecimientos al interior de esa corporación, que necesita ser depurada, pero que es una tarea que no depende de la voluntad y capacidad de un solo hombre, sino del respaldo de todos los órdenes de gobierno.
Desaire
Un fracaso resultó la asamblea informativa encabezada por los dirigentes nacionales de Morena, celebrada el sábado pasado en las instalaciones del Nuevo Toreo Tijuana, recinto que registró una pobre asistencia, caracterizada por un puñado de adultos mayores beneficiados con programas sociales del gobierno.
A pesar de la presencia de la líder nacional morenista, Luisa María Alcalde Luján, y del secretario de organización, Andrés López Beltrán, quien es hijo del ex presidente López Obrador, fue evidente la falta de operación política para movilizar a militantes y simpatizantes de ese partido, a diferencia de lo que ha ocurrido en anteriores ocasiones.
Tan desairado estuvo el evento, cuyo inicio se retrasó dos horas, que en el presídium, además de Alcalde Luján y López Beltrán, sólo estuvieron la presidenta de Morena en la entidad, Rosina del Villar Casas; el presidente del consejo estatal, César Castro Ponce; el secretario de Bienestar en Baja California, Nezahualcóyotl Jauregui Santillán; los senadores Armando Ayala Robles y Julieta Ramírez Padilla; mientras que en la primera fila se sentaron juntas las alcaldesas de Mexicali, Ensenada y San Quintín, Norma Bustamante, Claudia Agatón y Miriam Cano, respectivamente.
Así que en su primera encomienda como mandamás de Morena en este estado fronterizo quedó bastante a deber Rosina del Villar Casas, pero también resultó claro que las huestes de Adán Augusto López Hernández en Baja California tampoco movieron un dedo para llevar más gente, y si continúan en esa tónica será muy complicado que aquí logren afiliar a 300 mil ciudadanos, que es la meta local establecida por la dirigencia nacional, y que en toda la república pretende sumar 10 millones de personas en edad de votar.
Y el que de plano ni la burla perdona, fue Fidel Mogollón Pérez, el diputado emanado de Morena -aunque trascendió que ya lo expulsaron-, quien se las ingenió para tomarse una foto con Luisa María Alcalde Luján, imagen que de inmediato circuló por redes sociales.
Cobro a cruceristas
En Ensenada el sector empresarial y los prestadores de servicios turísticos gestionaron desde hace años que no se impusiera ningún pago a los visitantes que llegan en buque de pasajeros, porque esa medida recaudatoria provocaba que cruceristas no descendieran de la embarcación.
Sin embargo, a partir de enero los turistas que lleguen a México en cruceros tendrán que pagar la cuota de 860 pesos por persona que actualmente sólo aplica para visitantes que ingresan por vía aérea o terrestre, estos últimos para estancias de más de siete días.
La presidenta Claudia Sheinbaum pidió al Congreso reformar la Ley Federal de Derechos (LFD) para eliminar la exención a los pasajeros de cruceros, que estaba vigente desde 2012.
Además, el pago para todos los turistas, conocido como visitante sin permiso para realizar actividades remuneradas, aumentará 20 por ciento, de 717 a 860 pesos.
De enero a julio de 2024, México recibió a 5.9 millones de turistas vía cruceros, 90 por ciento de los cuales se concentraron en Cozumel, Mahahual, Puerto Vallarta, Ensenada y Cabo San Lucas.
La iniciativa del Ejecutivo justifica el cobro por el trabajo que realiza el Instituto Nacional de Migración (INM) para revisar las listas de pasajeros que entregan las líneas de cruceros, mismas que actualmente sirven para que se les entregue un permiso colectivo de estancia hasta por 21 días.
Hasta antes del sexenio pasado, el INM recibía una porción de los ingresos de visitantes sin permiso para realizar actividades remuneradas, pero una reforma de 2023 a la LFD ordenó destinar la totalidad de esos fondos a un fideicomiso militar creado para financiar la operación del Tren Maya.
Para 2025, los militares ya sólo recibirían 67 por ciento de ese dinero, 33 por ciento irá a la Tesorería de la Federación, y el INM tendrá recursos por otros cobros, como el que se aplica a los pasajeros que salen del país por vía aérea, mismo que aumentará de 185 a 223 pesos por persona.
Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor