LA BUFADORA
Por. – El Mosquito
ENSENADA BC 6 DE NOVIEMBRE DE 2024.- La historia será la que se encargue de juzgar a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, porque a partir de ahora nuestro país se encamina de forma acelerada a un cambio de régimen, cuyos efectos positivos o negativos los habrán de padecer las siguientes generaciones, porque lo que ayer se decidió no tendrá repercusiones inmediatas, como algunos lo consideran.
Norma Piña, Luis María Aguilar, Jorge Pardo, Margarita Ríos-Farjat, Javier Láynez, Alfredo Gutiérrez, Alberto Pérez Dayán y Juan Luis González Alcántara presentaron su renuncia anticipada, mientras que las ministras Lenia Batres, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz, confían en permanecer en el máximo organismo del Poder Judicial gracias a su afinidad con el partido gobernante.
Al fortalecerse el sistema presidencialista es factible que la siguiente reforma constitucional sea eliminar el financiamiento público para los partidos políticos, lo que terminaría de aniquilar a la debilitada oposición en México.
Debido a que Morena tiene mayoría calificada en la Cámara de Diputados y el Senado de la República, no le resultará difícil convencer a los legisladores del Partido del Trabajo y el Partido Verde Ecologista de México para que renuncien a esos partidos y se adhieran al morenismo que ya no necesitaría de aliados en los siguientes comicios. Al tiempo.
POLÍTICA RECAUDATORIA
Las fallas en los sistemas de justicia de todos los niveles de gobierno prevalece más allá de los discursos, y para muestra tenemos lo que ocurre en el ámbito municipal, donde al parecer la denominada “justicia cívica” está muy lejos de ser lo que nos prometieron, porque no hay espacio para la mediación o la negociación, porque los jueces cívicos (antes calificadores), de lo que menos entienden es de civismo y legalidad, porque todas sus resoluciones son en contra del ciudadano sin importar el motivo.
Lo anterior es a propósito de lo que publicó nuestro columnista Guillermo Hurtado Aviña, respecto a la actuación de los jueces quienes se niegan a darle la razón al ciudadano y tampoco revisan recursos de inconformidad, pues en lo que va del año, según nos dicen, ningún reclamo formalmente presentado ha sido resuelto a favor del ciudadano, volviéndose un sistema de justicia inquisitivo donde el acusador (policía de tránsito) siempre tendrá la razón.
Qué sentido tiene entonces contar con un nuevo modelo de justicia cívica si se le niega a la ciudadanía el derecho de audiencia y de defensa.
Ojalá que sí vayan a cambiar las cosas en esta administración, y que la alcaldesa Claudia Agatón Muñiz y el nuevo director de Justicia Cívica, Iván Barbosa, hagan lo necesario para que el discurso empate con la realidad, porque la función de un juez cívico debería de estar muy lejos de los fines recaudatorios.
HIPERSENSIBLE
Demasiado sensible resultó Ashley Giselle Casillas Gómez, la joven regidora del Partido del Trabajo (PT) en el recién estrenado Cabildo del municipio de San Quintín, porque a través de un larguísimo video que subió a redes sociales denunció ser víctima de violencia de género por parte de la alcaldesa morenista Miriam Cano Núñez, porque supuestamente le gritó y menospreció en una reunión previa a la sesión formal.
Como prueba, la edil petista compartió una grabación para demostrar que Cano Núñez le alzó la voz y la ninguneó por su juventud, pero la verdad sea dicha en ningún momento se escucha que la presidenta municipal le grite o la ofenda.
Casilla Gómez debería invertir toda esa indignación para denunciar actos de corrupción o poco transparentes al momento de que se sometan a voto la aprobación para modificar usos de suelo, permisos para la venta de alcohol, compras de vehículos y concesiones para la prestación de servicios públicos, entre otros importantes asuntos que competen a los regidores.
San Quintín, Baja California y el país necesita de una juventud que participe en los asuntos públicos, se involucre y tome decisiones en favor de las mayorías con base en la ley, pero se requiere defender esa postura con actitudes valientes, no con berrinches. ¿Qué pasará en el eventual caso que un grupo de ciudadanos le grite improperios o le hagan un airado reclamo?
Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor