LA BUFADORA
Por. – El Mosquito
CUCHILLITO DE PALO
¿Por qué nadie cuestiona las extrañas las ausencias de ciertos legisladores federales por “motivos de salud”, justo cuando se discuten las reformas constitucionales?
ENSENADA BC 5 DE SEPTIEMBRE DE 2024.- La titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), María Elena Andrade Ramírez, reconoció que podría haber más policías municipales de Ensenada vinculados con células de la delincuencia organizada, pero es tiempo que el alcalde Carlos Ibarra Aguiar y la presidenta municipal electa, Claudia Agatón Muñiz, no se pronuncian sobre este asunto, cuando se esperaría que de inmediato se ordenara la revisión de los procesos y condiciones en que se aplican los supuestos exámenes de confianza al interior de la corporación policiaca, y de la responsabilidad que tienen los mandos superiores, los cuales también se mantienen en silencio.
Entendemos que, como cualquier ciudadano, nuestras autoridades electas y de designación también estén temerosas de su integridad física, pero ellos sí gozan de protección las 24 horas del día, mientras el grueso de la población carece de ese blindaje; además, ellos pidieron el voto para ejercer el poder, que implica garantizar la seguridad pública, pero si se aterran a las primeras de cambio entonces la situación es alarmante.
LA HERENCIA
Es evidente que en las últimas administraciones municipales, por no decir casi todas, el papel de la persona que ha fungido como síndico procurador municipal en el Ayuntamiento de Ensenada ha sido intrascendente, pero las preocupantes condiciones en que recibirá la dependencia el próximo síndico, el joven Elí Oviedo Díaz, quien proviene del partido Fuerza por México, que fue en alianza con Morena en las pasadas elecciones, representan para él y la nueva administración todo un reto.
Esperemos que a Oviedo no le tiemble la mano para denunciar y sancionar a los ex funcionarios o servidores públicos en funciones que hagan mal uso de los recursos y bienes propiedad del gobierno municipal, de lo contrario será uno más, y lo mismo se debe exigir a los demás integrantes del Cabildo, porque a los regidores les gusta cobrar y nadar de muertito.
PREGUNTAS
De acuerdo con el senador Ricardo Monreal Ávila, “el pueblo está harto de la dictadura del birrete y de la toga, el pueblo está harto de la critocracia (gobierno de los jueces), el pueblo está harto de la corrupción, del nepotismo, del tráfico de influencias, del conflicto de intereses en el Poder Judicial”.
Y ya entrados en reformas para presuntamente mejorar la impartición de justicia, surge los siguientes cuestionamientos: En el caso de los tribunales que dependen del Poder Ejecutivo, como son los de Justicia Administrativa, los Tribunales Laborales y Los Tribunales Agrarios, ¿ahí no hay corrupción, nepotismo, tráfico de influencias y conflicto de intereses?, ¿acaso sus jueces y magistrados son impolutos?, ¿por qué ellos no someten sus nombramientos al voto popular?
Si ser juez, magistrado o ministro del Poder Judicial de la Federación no es algo tan complejo, como diría ya saben quién, pues es presumible que cualquier benjamín del derecho podría resolver conflictos administrativos entre los ciudadanos y la autoridad, o emitir laudos sobre conflictos laborales que impliquen millones de pesos, incluso dictar sentencias en litigios agrarios que impliquen miles de hectáreas y millones de pesos, porque eso no ha de tener mayor ciencia ¿O sí?
LA RESISTENCIA CIVIL
Los integrantes de la Marea Rosa amagaron con emprender acciones de resistencia civil pacífica si finalmente es aprobada en todas sus instancias la reforma judicial, la cual fue avalada la madrugada de ayer en la Cámara de Diputados.
“Tendremos que ir por acciones de resistencia civil pacífica. No es fácil que Morena se quede con todo y que nosotros nos quedemos cruzados de brazos”, advirtió el empresario Claudio X. González, de la agrupación Unidos, quien llamó a la población a concentrarse en torno al Senado de la República para aglutinar los esfuerzos de persuasión en contra de la reforma.
Pero más allá de las expresiones de inconformidad en el contexto nacional, lo que debe preocupar al gobierno, la próxima presidenta Claudia Sheinbaum y a la oposición, es la reacción de los llamados mercados internacionales, pero en especial de nuestros principales socios comerciales, los Estados Unidos, cuyas autoridades e inversionistas han expresado su temor sobre las consecuencias de una reforma al Poder Judicial mal implementada en México.
Las variables internas las puede controlar la abrumadora mayoría legislativa, pero las externas no.
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