El insecto clavó su aguijón en la tráquea, provocándole la muerte por atragantamiento.
CIUDAD DE MÉXICO 05 DE OCTUBRE DE 2016 (La Silla Rota).- Tomás Rangel, un hombre de 52 años, falleció en el barrio de San Miguel, Estado de México, luego de tragarse a un insecto que reposaba en su bebida.
"Estaba tomando pulque y cerveza, pero en un trago se comió a la abeja. De lo tomado que ya estaba, no se fijó lo qué había en el vaso", informaron las autoridades.
De acuerdo con Terra, su familia intentó conducirlo al hospital más cercano, pero el insecto clavó su aguijón en la tráquea, provocándola la muerte por atragantamiento.
“Cuando los socorristas lo checaron, ya no pudieron hacer nada, ya estaba muerto. Quedó sentado en la parte de atrás de esta unidad, sus familiares trataron de salvarlo, pero no había solución", explicaron agentes de Seguridad Pública Municipal.