MÉXICO DF 2 DE DICIEMBRE DE 2015 (La Silla Rota).- La red WiFi es una herramienta útil para todo el mundo. Sin embargo, a esta adolescente le causó la muerte.
Su nombre era Jenny Fry, tenía 15 años y estudiaba en Chipping Norton School, en Reino Unido.
Jenny fue encontrada colgando de un árbol cerca de su casa el 11 de junio de este año: ella se había suicidado.
Al respecto, una reciente investigación asegura que Jenny se suicidó luego de sufrir una reacción alérgica al WiFi de su escuela, el cual le había provocado dolores de cabeza, cansancio y agobiantes problemas en la vejiga, según informes del diario británico "Mail One".
Los padres de la menor aseguraron a las autoridades que los síntomas habían sido causados por una alergia a las conexiones de Internet inalámbricas y que su hija padecía el Síndrome de Hipersensibilidad Electromagnética. Sin embargo, la escuela donde iba Jenny seguía utilizando dicha red.